SINGAPUR.- Arabia Saudita propondrá un acuerdo para equilibrar los mercados petroleros que incluirá demandas a los miembros de la OPEP Irán e Irak para que limiten el crecimiento de su producción, así como la participación de productores fuera del grupo como Rusia y México, reportó Energy Intelligence.
El boletín de noticias dijo que Arabia Saudita propondrá un recorte de la producción de un millón de barriles por día (bpd) el próximo año para la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), pero sólo si los otros miembros y productores que no forman parte del grupo como Rusia, México, Omán y Kazajistán se comprometen con un esfuerzo coordinado.
Dentro de la OPEP, los saudíes querrían que Irak congele los niveles de producción en los volúmenes actuales de alrededor de cuatro millones de bpd, y que Irán, que espera que unas sanciones occidentales de exportación sean levantadas a principios del 2016, también participe en el esfuerzo.
Analistas dijeron que sería complejo que la propuesta sea aceptada por todas las partes implicadas, que tienen puntos de vista divergentes sobre cuáles productores deben reducir o limitar su bombeo.
Los mercados del petróleo subieron levemente, aunque los operadores se mantuvieron cautelosos.
"El mercado va a querer saber de las otras partes y tener una mayor seguridad de que lo que parece una posibilidad. No sólo que ellos (los otros productores) acepten, sino también que respeten el acuerdo", dijo Ric Spooner, analista jefe de CMC Markets en Sydney.
"El hecho de que Arabia Saudita haya planteado una propuesta sin duda le da un poco más de importancia", agregó.
El crudo Brent de Londres hoy subía 60 centavos, a 43,09 dólares por barril, y los futuros del petróleo en Estados Unidos ganaban 49 centavos, a 40,43 dólares por barril.
El delegado de alto rango de la OPEP citado en el reporte de Energy Intelligence dijo que tal acuerdo, incluso si es aceptado, no entraría en vigor en o inmediatamente después de la próxima reunión ministerial de la OPEP el 4 de diciembre, pero que esto se podría concretar en el 2016.
Esta sería, sin embargo, una primera señal de que Arabia Saudita, que se ha resistido hasta ahora a cualquier intervención, está dispuesta a alcanzar un compromiso después de que los precios del crudo se han reducido en más de la mitad desde junio del 2014.