BERLÍN.- El presidente del gigante automotor alemán Volkswagen, Matthias Müller, cree que la empresa tendrá una segunda oportunidad en Estados Unidos tras el escándalo de la manipulación de sus motores diésel.
"Está claro que vamos a tener que afrontar sanciones. Y seguramente que también seremos unos perdedores en Estados Unidos", dijo Müller en una entrevista.
"Pero también lo bueno de Estados Unidos es que hay una cierta simpatía por los perdedores. Y también está la posibilidad de renacer en América haciendo un buen trabajo. Y es lo que haremos", aseguró.
Müller se manifestó convencido de que la empresa sobrevivirá al escándalo pese a los miles de millones que probablemente le costará y pese al consiguiente daño de imagen: "Con seguridad. Y lo hará muy bien".
El directivo se mostró confiado de tener un buen año de ventas si la automotriz logra recuperar la confianza perdida. "Los negocios en China siguen funcionando muy bien y también nos hemos recuperado de un bache pasajero en mercados europeos como Italia y España", constató.
Volkswagen, el mayor grupo automotor de Europa y el segundo del mundo, detrás del japonés Toyota, reconoció el año pasado haber manipulado las emisiones de los motores diésel de 11 millones de vehículos con ayuda de un software para poder pasar los controles de las autoridades estadounidenses.
La compañía germana quedó sumida en la peor crisis de sus casi 80 años de existencia. En Estados Unidos fue acusada por el Departamento de Justicia de fraude y violación de las leyes medioambientales, lo que podría costarle el pago de indemnizaciones de hasta US$45.000 millones.