SANTIAGO.- #IGUALPEGAIGUALPAGA es el nombre de la campaña que busca generar pasiva conciencia sobre la desigualdad salarial entre hombres y mujeres que existe en Chile y el mundo, realizada por ONU Mujeres y Bar Liguria.
Según datos de la Organización de Naciones Unidas, la brecha salarial en el país se encuentra en el puesto 131 de 145 naciones analizadas en el último Foro de Davos y se ubica dentro de las más desiguales de Latinoamérica.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en tanto, calcula que el ingreso medio de un hombre en Chile es de aproximadamente $500.787 mientras que el de una mujer llega a los $338.791, es decir, un 30% de diferencia, teniendo el mismo empleo, horas trabajadas y grado académico.
El organismo, además estima que para que una mujer llegue a tener la misma remuneración que un hombre, ellas deberían trabajar 86 horas extras cada mes.
El anfitrión del encuentro, Marcelo Cicali, enfatizó en que "la brecha salarial accesoria a la violencia (física, sexual, psicológica o económica) no parte sólo del trabajo y la remuneración, parte también en la casa, quizás desde niños, aplicando el rol de la mujer a un trabajo forzado y forzoso".
"En este sentido es una tarea de todos el concientizar y educar tanto en el tema de la violencia como en el tema que hoy nos convoca (de la brecha salarial), de poner amplificadores y altavoces morales y éticos ante esta realidad", agregó.
El dueño del bar Liguria presentó un video que hicieron en el recinto donde muestra la reacción de hombres y mujeres que, al entrar a comer al restaurante, notaron una extraña advertencia en las cartas: "Hoy los hombres pagan un 30% más por su consumo".
Durante la presentación también estuvieron presentes la representante de ONU Mujeres en Chile, María Inés Salamanca; la Presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa; la directora del INE, Ximena Clark; la alcaldesa de Providencia, Josefa Errázuriz; el superintendente de Bancos e Instituciones Financieras, Eric Parrado; y el presidente de Sonda, Andrés Navarro.
"Chile tiene un importante margen de mejora, pero creemos que hay tendencias, personas comprometidas en el sector público y privado que llaman a la esperanza. La reducción de la brecha salarial de género es uno de los retos de Naciones Unidas para el 2030, que busca crear condiciones que permitan igualdad en el acceso a los recursos económicos y financieros de las mujeres", sostuvo Salamanca.
Por su parte, la líder de la multisindical expresó que "efectivamente no sólo necesitamos buenas leyes que se hagan cargo y parte de las discriminaciones que vivimos las mujeres en el mundo del trabajo como el tema de la equidad salarial, sino que también perfeccionar la Ley de igualdad salarial para que sea un instrumento que sea posible de fiscalizar y que garantice que no va a haber arbitrariedad en la norma".