EFE
CHENGDU.- El Gobierno argentino está trabajando en una reforma fiscal estructural con el objetivo de que el país tenga un nuevo sistema impositivo para finales de 2019, anunció hoy el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay.
Durante su intervención en un foro sobre política fiscal que se celebra en la ciudad china de Chengdu (centro del país) en paralelo a la reunión financiera del G20, Prat-Gay trasladó a sus homólogos de este grupo económico las principales claves en esta materia del Ejecutivo que preside Mauricio Macri.
Uno de sus mayores objetivos es aprobar un nuevo marco fiscal antes de que termine el mandato del vigente gobierno, por lo que una comisión del Ministerio de Hacienda y Finanzas ya trabaja en esta materia, dijo el titular argentino del ramo.
"También hay una comisión del Congreso que trabajará en esta cuestión con vistas a tener un nuevo sistema de impuestos para el final de 2019 y la idea es asegurarnos que no hay disyuntivas, que podemos conseguir reformas fiscales a favor del crecimiento y de la igualdad", explicó Prat-Gay.
Sin embargo, el ministro argentino señaló que el primer pilar de la política fiscal de la Administración Macri es la "normalización", con la eliminación de tasas y de regulaciones, así como de controles de divisas que, a juicio de Prat-Gay, "operaban como un impuesto añadido sobre las exportaciones".
"Dejamos de subsidiar la oferta de servicios públicos para subsidiar la demanda y centrarnos en aquellos que realmente la necesitan", señaló el titular de Hacienda y Finanzas.
El ministro argentino informó también a sus homólogos del G20 de la amnistía fiscal que aprobó el mes pasado el Gobierno argentino para "ampliar la base impositiva", una medida que incluyó dentro de sus políticas fiscales de transparencia.
Además, Prat-Gay afirmó que el Ejecutivo de Macri ha tomado medidas para simplificar su sistema impositivo, apoyar a las pymes y transferir más fondos a las provincias.
Tras esa intervención, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, aplaudió las políticas expuestas por Prat-Gay: "Esos seis pilares son claramente muy ambiciosos", afirmó.