BERLÍN.- Los ministros de Trabajo del G20 se comprometieron a mejorar la ocupación de las mujeres y reducir la brecha salarial, fomentar la integración laboral de inmigrantes y refugiados, reducir el desempleo juvenil y garantizar condiciones dignas en las cadenas internacionales de producción.
Estos objetivos fueron destacados en el documento final firmado al concluir la cumbre ministerial celebrada este jueves y viernes en la localidad alemana de Bad Neuenahr-Ahrweiler.
"Vamos a trabajar juntos para que todas las personas puedan beneficiarse de la digitalización del mercado laboral y que las mujeres y los hombres compartan por fin la responsabilidad del trabajo y la familia", manifestó en un comunicado la ministra alemana, la socialdemócrata Andrea Nahles.
Frente a la creciente digitalización del mundo laboral y el riesgo de exclusión de muchos trabajadores, los ministros del G20 apostaron por la formación continuada y también por proteger las nuevas formas de trabajo, controlando condiciones y horarios.
En este contexto, Báñez anunció la constitución en los próximos meses de un grupo de expertos que elaborará un Libro Blanco con aportaciones a los debates que tendrán lugar en 2018 sobre el futuro del trabajo en el marco del G20.
La titular española de Empleo, Fátima Báñez recordó que España tiene dos objetivos en materia laboral: a corto plazo, recuperar los 20 millones de empleos perdidos durante la crisis económica, lo que ve posible con la creación de 500.000 empleos al año; y, a medio y largo plazo, trabajar en la que denominó "agenda del talento".
Junto a la digitalización, los ministros subrayaron la necesidad de mejorar la calidad del empleo de las mujeres y abogaron por reglas de transparencia salarial, aumentar su participación en puestos directivos, luchar contra las jornadas reducidas no deseadas y reducir su presencia en sectores de bajos salarios y en la economía informal.
Además de ratificar la importancia de la inclusión laboral de inmigrantes y refugiados como vía para impulsar el crecimiento y mejorar la convivencia, reiteraron la necesidad de garantizar condiciones laborales dignas en las cadenas internacionales de producción y suministro.
"La vulneración del trabajo decente y de los principios y derechos del trabajo no pueden ser fuente de competitividad", recalcó la ministra española al participar en la sesión dedicada a las cadenas mundiales de suministro sostenibles.
En el apartado sobre el empleo juvenil, los titulares de Trabajo del G20 situaron como una prioridad evitar la exclusión laboral de los jóvenes e hicieron hincapié en la importancia de la formación profesional.
Formación y trabajo serán uno de los ejes de Argentina al asumir el año que viene la presidencia del grupo de las principales economías del mundo y las potencias emergentes, destacó el titular de Trabajo de ese país, Jorge Triaca, quien avanzó su interés en abordar el problema del desempleo, el trabajo precario y la economía informal.
"Estamos convencidos de que los problemas que son comunes en los países en desarrollo pueden también darse en los países desarrollados si no encontramos soluciones inteligentes para la integración laboral de inmigrantes y refugiados", señaló como ejemplo.