SANTIAGO.- "La principal preocupación que tiene el agro nacional está relacionada con la agravada crisis hídrica que nos afecta por tantos años, que no solo compromete el presente, sino también nuestra proyección hacia el futuro", sostuvo Ricardo Ariztía, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA).
En su discurso durante la inauguración de Enagro 2018, el líder del gremio agrícola abordó el problema de la falta de agua que existe en distintas zonas del país y la urgencia de tomar medidas al respecto, como decisiones de inversión en infraestructura a largo plazo.
"Chile necesita alrededor de US$8.000 millones en un período de 10 años en proyectos de inversión para responder a la creciente demanda y menor oferta de agua", estimó el presidente de la SNA.
En ese sentido, señaló que aunque Chile es "un país privilegiado en materia de recursos hídricos, con 101 cuencas hidrográficas, 1.251 ríos y 24.000 glaciares, contamos con severos déficits en algunas regiones", los cuales se ven amenazados con extenderse producto del cambio climático, afectando el desarrollo de la agricultura.
Debido a esta situación, Ariztía aseguró que los agricultores quieren aportar con "ideas y financiamiento de grandes obras de riego”, lo que es "un imperativo en consideración de las urgentes necesidades que el país tiene".
"Estamos disponibles para abordar estos desafíos de inversión para que, en un esfuerzo público-privado, dotemos al país de la infraestructura de riego indispensable para su desarrollo", afirmó.
Asimismo, Ariztía indicó que desde el punto de vista institucional es necesario que el "Estado nos permita tomar decisiones con mayor celeridad". Esto, eliminando "las trabas actuales que dificultan los procesos de inversión", como por ejemplo, al simplificar normativas medioambientales.
