Un cargamento de gasolina producida en Estados Unidos está de regreso en Texas tras pasar semanas en la costa de Chile.
Después de navegar 6.759 kilómetros hacia Chile, el buque BW Raven ha regresado a Houston esta semana con gasolina terminada con la notificación de "devoluciones de productos estadounidenses", según datos de la Aduana de Estados Unidos recabados por Bloomberg.
El buque regresó a Estados Unidos con aproximadamente 145.000 barriles de gasolina premium de una filial de ventas de combustible al por menor de Empresas Copec en Chile, según los datos de Aduanas.
Esa cantidad sería suficiente para llenar el tanque de aproximadamente 150.000 camionetas Ford F-150. Por el momento, el Servicio Nacional de Aduanas no tendría antecedentes del caso. También se contactó a Copec y desde la empresa señalaron a
Emol que, por ahora, no harían declaraciones y que estaban recabando información al respecto.
El viaje del barco hacia Chile comenzó con paradas en Houston y Port Arthur, Texas, a mediados de mayo, según muestran los datos de documento de conocimiento de embarque de la Aduana estadounidense. El buque cisterna, que también llevaba una carga parcial de diésel ultra bajo en azufre, pasó unas tres semanas en el puerto de Quintero el mes pasado antes de navegar de regreso a Houston, de acuerdo los datos de envío.
Vitol estaba registrado como consignatario del combustible a su regreso a Houston. Andrea Schlaepfer, portavoz de Vitol en Londres, aseguró que la compañía no comenta sobre sus actividades comerciales.
La primera economía del mundo ha enviado entre uno y dos cargamentos de gasolina terminada mensualmen a Chile desde 2010, según datos de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos.
El rechazo de una carga enviada a Chile sería inusual, según personas familiarizadas con los envíos de combustible de Estados Unidos a América Latina. Normalmente, un desacuerdo se resolvería mediante una reducción negociada en el precio, dijo una de las personas.