El superintendente de Servicios Sanitarios (s), Jorge Rivas, informó que se están investigando los cortes de agua que han afectado a los clientes de Essbio en Chiguayante y que en una semana estarían en condiciones que formular cargos por la responsabilidad de la empresa en las suspensiones del suministro.
Tras presenciar el lugar de la falla y revisar la situación, la autoridad dijo que "estamos realizando una investigación que esperamos concluya esta semana, para la próxima semana iniciar el proceso de sanción correspondiente donde se formularán cargos a Essbio. Como es un debido proceso, la empresa tiene la posibilidad de entregar sus descargos, después de lo cual se decidirá la sanción".
"Estamos viendo algunas infracciones evidentes, como la
discontinuidad del servicio, la
afectación a la población y algunas otras cosas que van apareciendo. Por las dos infracciones ya detectadas hay
multas con un tope máximo de $600 millones", agregó.
Una de las infracciones detectadas, tiene que ver con que la compañía no parece tener el mismo estándar en toda la región respecto al abastecimiento alternativo.
"No hay un estándar común en todo Essbio. En Los Ángeles hicieron operar el plan de suministro alternativo más rápido que en Chiguayante y eso no puede ser. En la empresa están haciendo su autocrítica, estamos pidiendo mayor seriedad. Fue lento en Chiguayante y creemos que esto también es parte de los incumplimientos", indicó.
En ese sentido, afirmó que hay responsabilidades compartidas en el sistema sanitario: "Es responsabilidad de la empresa que tiene que cumplir lo que dice en el papel. También hay deficiencias en nuestra legislación que no hace alusión al abastecimiento alternativo, por eso se está tramitando un proyecto de ley que va a establecer estándares para los planes de suministro alternativo. Y, en tercer lugar, tenemos que fiscalizar mejor estos planes que voluntariosamente se están llevando a cabo. Tenemos que acelerar la fiscalización, para que estén firmados cuanto antes. Tenemos muchas localidades que tienen su plan de abastecimiento alternativo firmado, pero en el caso de Chiguayante no lo estaba".
"Las fallas pueden ocurrir, son fierros que pueden llegar a fallar, pero las reparaciones tienen que hacerse bien a la primera porque estas empresas son especialistas, trabajan todo el día con esta infraestructura".
Jorge Rivas, superintendente (s) SISS
Respecto a las advertencias que el municipio había hecho a la empresa en torno a las filtraciones en las instalaciones, el superintendente señaló que cuando se trata de agua potable "los trabajos se hacen bien a la primera. Nos estamos dando cuenta de que
en realidad hubo dos intentos anteriores y a la tercera recién funcionó.
Esto no puede ser. Esto es inaceptable".
Junto con ello, Rivas comentó que "estamos haciendo un mapeo en todo el país para identificar el estándar que tienen las empresas, porque tenemos que mejorar. Estos son tiempos de crisis, la industria sanitaria así también lo ha entendido por lo que vamos a tener que trabajar en conjunto para mejorar el estándar".
Pese a que, según manifestó, la falla de Chiguayante por ahora no amerita tramitar una caducidad de la concesión, se fiscalizará el pago de la compensación que establece la Ley del Consumidor, que en este caso debiera ser de 20 días de suministro.
Respecto a la necesidad de mayor fiscalización, consideró que "no es suficiente tener cuatro fiscalizadores para una región tan grande, con tantos sistemas (sanitarios). Eso ha hecho eco en el Congreso. Nosotros esperamos un aumento de presupuesto importante para tener una mayor dotación de fiscalizadores".
