SANTIAGO.- En una decisión unánime, el
Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) condenó a los laboratorios Baxter y Sanderson por colusión en licitaciones públicas de suero fisiológico.
El TDLC acogió así la
acusación formulada en julio del 2017 por la
Fiscalía Nacional Económica (FNE), estipulando que ambas empresas participaron en acuerdos anticompetitivos destinados a afectar el resultado de dos licitaciones, imponiendo
por ello una multa de $119 millones para cada una, además de la obligación de adoptar programas de cumplimiento.
En la sentencia se confirmó que la colusión fue por los procesos de compra de cloruro de sodio al 0,9% o suero fisiológico, contenido en envase colapsable de 100 ml, producto indispensable para los centros de salud. Ambas licitaciones involucraron un monto total de poco más de $ 460 millones.
Las licitaciones afectadas fueron convocadas por el Hospital Regional de Concepción Guillermo Grant Benavente y por la Central de Abastecimiento del Sistema Nacional de Servicios de Salud (Cenabast), principales compradores de este medicamento durante 2012, año en que ocurrieron los hechos denunciados.
"Este fallo ratifica que la colusión es el atentado más grave contra la libre competencia y un foco prioritario en la agenda de la FNE, incluso cuando ésta no produzca los efectos esperados por sus partícipes", indicó el fiscal nacional económico, Ricardo Riesco.
"La mera existencia de un acuerdo entre competidores es reprochable, más allá si éste logra concretarse o si alguno de los partícipes se aleja de lo acordado, como ocurrió en este caso", agregó.
En su requerimiento, la FNE sostuvo que los laboratorios tomaron contacto a través de sus gerentes generales antes del cierre de la fase de presentación de ofertas en ambas licitaciones, con el fin de asignarse entre ellas quién debía adjudicarse cada proceso.
De esa manera, definieron que Sanderson debía ser la ganadora, aunque en los hechos, y por razones ajenas a la voluntad de los implicados, los resultados no fueron los esperados. Esto, ya que en el primer caso el equipo comercial de Baxter no cumplió lo acordado por su gerente general, en tanto que en la segunda licitación un competidor ajeno al acuerdo ilícito ganó el proceso licitatorio.
$119Millones deberá pagar cada uno de los laboratorios.
El contacto entre los gerentes quedó al descubierto tras una interceptación telefónica y registro de comunicaciones utilizada por la FNE durante el proceso investigativo.
Esta sentencia constituye la última arista de una investigación que se inició a partir de denuncias formuladas por la Contraloría General de la República y por el Ministerio de Salud sobre conductas anticompetitivas en el marco de licitaciones públicas de medicamentos realizadas el 2012.
Tras la sentencia, las partes tienen un plazo de 10 días hábiles para presentar un recurso de reclamación ante la Corte Suprema.