El cobre encadenó su segunda caída consecutiva este viernes en la Bolsa de Metales de Londres: cerró con una baja de 0,45%, al transarse en US$2,977 la libre contado "grado A".
Valor que se compara con los US$2,991 del jueves y los US$3,024 del miércoles, cuando registró su mayor nivel desde el 27 de junio de 2018, superando por primera vez en casi dos años y dos meses los US$3 la libra.
Así, pese a los retrocesos registrados hoy y ayer, el metal rojo anotó una importante subida semanal de 3,5%, rompiendo con dos semanas consecutivas de caídas. Con esto, el promedio mensual del precio del cobre escaló a US$2,929 y el anual a US$2,589.
Según Reuters, el cobre cayó este viernes producto de las mayores preocupaciones sobre la recuperación de algunas de las principales economías del mundo, pero la creciente demanda china y los bajos inventarios permitieron que el cobre registrara una subida semanal.
"El mercado tiene una visión general positiva sobre el cobre porque la demanda china se ha ido recuperando bien (...), se mantiene pese al impacto de factores adversos", dijo a la analista de ING Wenyu Yao.