Era la Argentina de 1993, en pleno Gobierno de Carlos Menem, cuando del otro lado de la cordillera un potencial gigante comenzaba su aventura internacional: Falabella se instalaba en tierras trasandinas, abriendo su primera tienda fuera de Chile en Mendoza e iniciando una historia de 27 años en ese país.
Lo que inició con varias tiendas por departamento, poco a poco el negocio se fue expandiendo al rubro del mejoramiento del hogar a partir del 2000 e incluso el financiero, al comenzar a operar con las tarjetas CMR en el vecino país.
Falabella llegó tener un total de 20 tiendas a lo largo de Argentina, de las cuales 11 se ubicaban en el Gran Buenos Aires. Sin embargo, el año pasado comenzaron las señales de que algo no andaba bien con su primer receptor extranjero, cuando el grupo con presencia ya en siete países decidió bajar la persiana de uno de sus locales más grandes en tierras trasandinas, aquel ubicado en calle Florida.
Así, la combinación de los problemas económicos propios de Argentina y la crisis de la pandemia, llevaron a que la compañía tomara una estrategia clara para su operaciones en dicho país: bajar su exposición. Para ello informó el lunes que cerrará cuatro de sus tiendas en Buenos Aires, además de señalar que se encuentra en la búsqueda de un socio estratégico con el objetivo de que el negocio sea rentable.
"Falabella se encuentra evaluando opciones de rentabilización de las operaciones de sus filiales en Argentina, las que podrían incluir el ingreso de un socio estratégico para las mismas", indicó la compañía ayer a través de un comunicado. Y añadió que "la pandemia aceleró el proceso de digitalización del retail y ha afectado sus resultados en dicho país".
Por ello, "para adaptarse a esta nueva tendencia y hacer sustentable la operación en Argentina en el tiempo", la empresa determinó cerrar dos tiendas Sodimac y dos Falabella Retail emplazadas en la capital argentina.
A primera hora del lunes, y producto del mandato de venta que otorgó la empresa chilena al banco de inversión Columbus Marchant Banking, medios trasandinos informaban que Falabella buscaba un comprador para todos sus negocios en ese país, incluyendo las tiendas de Falabella Retail, sus locales Sodimac y la tarjeta CMR.
En esa línea, el diario La Nación de Argentina, señalaba que detrás de esa salida se conjugarían varios factores, como el mal momento que atraviese la economía argentina, con caídas inéditas en el consumo, sumado a las restricciones para importar. Eso último especialmente relevante considerando que buena parte del negocio de Falabella se basa en importaciones.
Según expusieron desde Falabella a Emol, producto del mandato de venta que se le dio a dicho banco de inversión, algunos asumieron que se estaba buscando un comprador para todos los negocios del grupo en Argentina, lo que no es así, afirmaron, recalcando que lo que se está haciendo es buscar un socio estratégico para darle sustentabilidad a las operaciones en ese país. De todas formas, la intención, al menos, de achicarse es un hecho.
Fuerte caída de ingresos en Argentina
Actualmente, la compañía cuenta con 19 tiendas en Argentina, 10 Falabella Retail y 9 Sodimac, entre todas ellas, se cerrarán cuatro. Asimismo, opera el negocio financiero a través de las tarjetas CMR, teniendo hasta finales de 2019 casi 400 mil clientes con saldo.
En su análisis razonado correspondiente al segundo trimestre de 2020, Falabella detalló que su división en Argentina mostró una caída de 58,9% en ingresos entre abril y junio, comparado con el mismo periodo del año anterior. Esto, en parte explicado por un escenario de consumo débil y la imposibilidad de operar normalmente las tiendas debido a la pandemia.
Resultados que resultan más negativos que en otros países donde opera el grupo, como Perú, en donde los ingresos cayeron 30,8%. Colombía, en tanto, apuntó caídas en el segundo trimestre de 17,4%, mientras que las ventas en Brasil disminuyeron 5,7%.
58,9%cayeron los ingresos de Falabella en Argentina en el segundo trimestre de 2020
Asimismo, la empresa explicó que el formato tienda por departamento sufrió cierre total durante el mes de marzo, abril y primera mitad de mayo, operando de manera parcial durante el resto del trimestre. Mientras que mejoramiento del hogar no tuvo operaciones durante el mes de marzo e inicios de abril, alcanzando casi la apertura total para el resto del trimestre.
Según la memoria anual de Falabella en 2019, Argentina representó el 4% de los ingresos de la compañía y contaba con 4.847 trabajadores, lo que a junio del presente año descendió a 4.742 personas.
En el primer semestre de 2020, Falabella en Argentina anotó $99.763 millones en ingresos por tiendas por departamento y mejoramiento del hogar, frente a los $493.589 millones que registró Colombia o los $357.705 millones que apuntó Perú en los mismos ítems.
Argentina concentraba el año pasado el 9% del total de tiendas por departamento que tiene Falabella en todos los países en los que opera, y el 6% de las tiendas para el mejoramiento del hogar. Además, Falabella Retail tenía hasta 2019 el 2% de la participación de mercado en el comercio minorista argentino, mientras Sodimac acaparaba 1% de la participación de mercado en su segmento.
En tanto, de acuerdo con el Banco Central de la República Argentina, la participación de mercado de CMR en ese país, según las colocaciones de tarjetas de crédito y préstamos personales, asciende al 0,5%.
La estrategia de achicarse en Argentina se da en medio de un escenario complejo para la empresa, considerando que la casa matriz de Falabella reportó pérdidas por US$157 millones en el segundo trimestre de 2020 en comparación a los mismos tres meses del año pasado, cuando se anotaron ganancias por cerca de US$124 millones. En tanto, la gigante del retail latinoamericano apuntó una disminución de 24,7% en sus ingresos respecto a 2019, anotando US$2.140 millones.
