Una pérdida superior a $13 mil millones registraron las isapres abiertas durante el primer trimestre de este año, según un estudio elaborado por la Asociación de Isapres. Se trata del peor registro anotado por el sector para dicho período.
El balance, que incluye a las aseguradoras Banmédica, Colmena, Consalud, Nueva Masvida y Vida Tres, se explica principalmente por el congelamiento del precio de los planes, que se aplicó entre 2020 y 2021.
Las pérdidas también responden al fuerte incremento del gasto en prestaciones de salud, que creció en $42 mil millones comparado al primer trimestre de 2021, al pasar de $381 mil millones a $423 mil millones, lo que se traduce en un alza de 11%.
Algo similar ocurrió con las licencias médicas, cuyo costo subió en $15 mil millones entre enero y marzo de este año, pasando de $168 mil millones a $183 mil millones, es decir, un aumento del 9%.
Otro elemento que se suma a los complejos resultados es la judicialización contra las aseguradoras, que ha implicado costos por $13 mil millones, asociado a la industria de abogados que se ha instalado para litigar contra el sector.
Respecto del balance, el presidente de la Asociación de Isapres, Gonzalo Simon, explicó que "son cifras que preocupan y que dan cuenta de la crisis financiera e institucional que enfrentan las aseguradoras, que custodian la salud de más de tres millones de afiliados, que diariamente ven resueltas con prontitud, calidad y oportunidad sus necesidades médicas".
En ese contexto, Simon aclaró que, si bien durante 2020 la demanda de prestaciones mostró una desaceleración asociada a la pandemia, el año pasado el flujo se incrementó por sobre lo normal entre las personas que habían postergado sus requerimientos de salud.
"Son cifras que preocupan y que dan cuenta de la crisis financiera e institucional que enfrentan las aseguradoras, que custodian la salud de más de tres millones de afiliados, que diariamente ven resueltas con prontitud, calidad y oportunidad sus necesidades médicas"
Gonzalo Simon, presidente de la Asociación de Isapres
Dicha actividad se acrecentó aún más durante el primer trimestre de este año, añadió el representante del gremio, a la vez que indicó que, producto del congelamiento de los planes, los ingresos no lograron equiparar el gasto que demandaron los afiliados.
"Si consideramos los últimos dos años en que los precios se congelaron, el aumento de los costos para el sector fue de 25,7%. Sin embargo, al aplicar la Ley 21.350 que regula la adecuación de los precios, la Superintendencia de Salud mandató que el alza no podrá superar el 7,6%", sostuvo el titular de la asociación, quien añadió que, solo en el último año "Fonasa aumentó el gasto en un 11,7%, es decir, un incremento mucho mayor al que se les permitió a las aseguradoras privadas".
"Los complejos resultados financieros se producen, además, en medio de la incertidumbre por el futuro del sector. Según lo aprobado por el pleno de la Convención Constitucional, las isapres no formarán parte de la seguridad social, pues se crearía un Sistema Nacional de Salud de carácter público, al que deberán adscribir, obligatoriamente, todos los chilenos con su 7%, perdiendo el derecho que han tenido hasta hoy de elegir entre el sistema público o privado para destinar su cotización obligatoria", destacaron desde la Asociación.