Más de 1.000 vuelos de Lufthansa fueron cancelados el miércoles debido a una huelga de un día del personal de tierra de la aerolínea alemana, lo que afectó a decenas de miles de pasajeros en el último episodio de problemas en el transporte en Europa.
Alrededor de 134.000 pasajeros tuvieron que cambiar sus planes de viaje o cancelarlos. Al menos 47 conexiones se habían cancelado ya el martes, según reportó la agencia noticiosa alemana dpa.
Los principales centros operativos de Lufthansa, en Fráncfort y Múnich, eran los más afectados, pero también se cancelaron vuelos en Düsseldorf, Hamburgo, Berlín, Bremen, Hannover, Stuttgart y Colonia.
La aerolínea aconsejó a los pasajeros afectados que no acudiesen a los aeropuertos ya que la mayoría de los mostradores no estarían atendidos.
El sindicato de trabajadores Ver.di anunció la huelga el lunes mientras trata de aumentar la presión sobre Lufthansa en las negociaciones salariales para cerca de 20.000 empleados de sus filiales logísticas, técnicas y de carga.
El paro se produce en un momento en que los aeropuertos en Alemania y del Europa sufren alteraciones y largas filas en los controles de seguridad por la escasez de personal y el aumento de la demanda de viajes.
A medida que se dispara la inflación, las huelgas del personal de aerolíneas en Francia y de los pilotos de Scandinavian Airlines en Suecia, Noruega y Dinamarca para reclamar mayores salarios, han agravado el caos para los viajeros, que tenido que hacer frente a cancelaciones de última hora, largas demoras, pérdidas de equipaje y largas esperas por sus maletas en aeropuertos de toda Europa.
Los viajes se están incrementando coincidiendo con la temporada estival de vacaciones luego de dos años de restricciones por el covid-19, sobrepasando a las aerolíneas y aeropuertos, que no tienen personal suficiente tras los despidos por la pandemia. Aeropuertos como Heathrow, en Londres y Schiphol, en Ámsterdam, han limitado los vuelos diarios o el número de pasajeros que reciben.
La huelga de Lufthansa comenzó a las 03:45 de la madrugada del miércoles y está previsto que termine a primera hora del jueves. Estos "paros de advertencia" son una táctica habitual en las negociaciones laborales en Alemania y suelen durar entre varias horas y uno o dos días.
Ver.di pide un incremento salarial del 9,5% para este año y dice que la oferta realizada por la aerolínea a principios de mes, que incluye un acuerdo para un periodo de 18 meses, está muy lejos de sus exigencias.
El jefe de personal de Lufthansa, Michael Niggemann, indicó que "este supuesto paro de advertencia en medio de la temporada alta de viajes de verano simplemente no es proporcionado".