La propuesta del Presidente Boric de unir a América Latina "bajo una sola voz" para presionar a las naciones más ricas para que reduzcan sus emisiones más rápido, e incluso "condicionar las exportaciones de materias primas o energía limpia a cambios en el comportamiento de consumo en los países más desarrollados", encendió el debate.
En ese sentido, el Ex biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, en una entrevista que sostuvo con Radio Pauta, fue crítico al planteamiento del Presidente: "No veo mucha elaboración tras esa idea, está desconectado de cómo funcionan los mercados internacionales. Esto no tendría ninguna efectividad, más bien podría ser algo contraproducente para Chile".
Asimismo, afirmó que este es un anuncio que "no ayuda a atraer inversión y darle confianza a los socios comerciales, dar este tipo de señales es un error. No me parece bueno dejar caer una idea así de forma tan liviana sin haberla evaluado previamente".
"Si esto lo hubiera conversado con sus asesores o con el ministro de Hacienda, se hubieran dado cuenta de que no tenía ningún sentido hacerlo público. La señal de improvisación no es buena.La verdad es que esta es una idea sin fundamento, tiene en su raíz un desconocimiento muy profundo”, criticó.
Jobet también comentó que "todos estamos de acuerdo con acelerar la transición a una economía más limpia, frenar el cambio climático y cuidar el medioambiente", pero insistió en ser "escéptico a que el rol de Chile pase por hacer algo como lo que sugirió el Presidente de la República".
"Yo me imagino que hay supuesto que Chile tiene productos que son muy escasos y tiene un rol muy importante en el mercado, y nosotros podríamos condicionar a los compradores a que se comporten de una u otra manera, de lo contrario no accederían a nuestros productos, pero eso no tendría mucho sentido", afirmó el exministro.
Durante la entrevista explicó que Chile produce un 27% de cobre del mundo, materia prima muy importante para la transición energética, "es verdad que tenemos una posición muy importante, pero no estamos solos en el mercado, hay reservas importantes en muchos otros países. Las reservas mundiales de cobre son casi 900 millones de toneladas, estas reservas alcanzarían para 45 años. Entonces,si Chile deja de venderle a otros países, los otros países tienen más alternativas", detalló Jobet.
Además, cuestionó qué es lo que pasaría con los tratados de libre comercio (TLC). "Si nosotros vamos a empezar a poner condiciones a los compradores de nuestros productos más importantes, ¿Es consistente con los acuerdos de libre comercio que tenemos firmados? ¿Se puede hacer de manera unilateral? ¿Qué repercusiones podrían tener ellos con nosotros?", finalizó.