La Fiscalía Nacional Económica (FNE) archivó la investigación sobre la adquisición por parte de Carozzi del negocio de helados de Unilever, que opera las marcas Bresler y Melevi, iniciada luego de haber recibido una denuncia que advirtió sobre esta operación de concentración.
De acuerdo al denunciante, este negocio debió haber sido notificado de manera obligatoria antes de llevarse a cabo y, además, podría generar riesgos de conglomerado, al agregar la venta de helados al portafolio de alimentos de Carozzi, potenciando su posición en el mercado en Chile.
Según el nuevo régimen legal de notificación obligatoria de fusiones, radicado en la FNE desde junio de 2017, es obligatorio notificar operaciones de concentración cuyas partes registren ventas por 2,5 millones de UF de manera conjunta y de 450 mil UF en forma individual.
Durante la investigación, la FNE revisó la información contable y financiera de Unilever para comprobar si se habían igualado o superado los umbrales de notificación y si había existido una infracción al deber de notificación obligatoria, lo que podría ser sancionable bajo la normativa de libre competencia.
Luego de este análisis y de reconstruir las ventas en Chile generadas por los activos de Bresler, la FNE pudo concluir que las ventas de Unilever se encontraban debajo del monto de los umbrales de ventas, aunque por un escaso margen
De este modo, la Fiscalía concluyó que no se configuró una infracción al no notificar la fusión antes de su cierre. Sin embargo, en la resolución que archiva la investigación la FNE advirtió sobre la conveniencia de notificar transacciones que se encuentran al límite de los umbrales que hacen obligatoria la notificación.
“En aquellos casos en que, como éste, las ventas de los activos se encuentran realmente al límite del cumplimiento de los umbrales de notificación, y en que las partes detentan una posición competitiva relevante en sus respectivos mercados, sería aconsejable y resulta eficiente utilizar la herramienta de notificación voluntaria de operaciones de concentración", señaló la fiscalía.
Lo anterior, con el objetivo de "evitar un eventual escrutinio ex post de una operación de concentración a la luz del artículo 48 inciso noveno del DL 211, con la consecuente incertidumbre y costos de transacción que ello conlleva tanto para las partes como para la fiscalía".
Aunque existía traslape horizontal producto de la fusión, ya que Unilever era dueño de Bresler y Melevi y Carozzi era dueño de Emporio La Rosa y Palettas, la FNE descartó la posibilidad que Carozzi pudiese aumentar los precios de los helados en Chile, así como también riesgos de conglomerado.