Santiago Valdéssocio fundador de VestuáLa industria de la moda históricamente ha tenido que adaptarse a constantes cambios, y el desafío que más urge en la actualidad es el cambio climático. De ahí que nació Vestuá, una de las firmas chilenas pioneras en lo que respecta a ropa sustentable.
La fashion-tech surgió del anhelo de sus fundadores por fomentar el reciclaje y darle una nueva vida a artículos usados. De la mano de la tecnología en todos sus procesos, la empresa actúa como intermediaria para la venta y compra de ropa.
Actualmente, están presentes en Chile y México, habiendo reutilizado más de 1.000.000 de prendas.
En "Lo pensó/lo hizo" de Emol, Santiago Valdés cuenta cuándo y cómo nació Vestuá, su gran motor en el negocio y sus planes de expansión al corto plazo.
Vestuá es una fashion-tech que hace muy fácil darle una nueva vida a la ropa que ya no usas.
Muchas personas quieren reutilizar su ropa para reducir el costo medioambiental que genera, pero no es fácil y requiere mucho tiempo. Decidimos crear la solución más fácil y cómoda para que nadie quede fuera.
Retiramos la ropa en el domicilio y nos encargamos de todo, desde clasificar, fotografiar, vender (o donar), despachar y pagarle a la vendedora sus ganancias (y nos quedamos con una comisión).
La ropa que nos entregan se vende en nuestra tienda online (vestua.com) donde se puede comprar desde todo el país. La gracia es que los productos son de las marcas más populares (como H&M, Zara, Mango, etc.) y en promedio cuestan un 50% menos que los nuevos, pero están en muy buen estado.
Si hay algo que no puede venderse (ya sea por el estado en que se encuentra o porque no habrán compradores), ofrecemos hacernos cargo de la donación de manera gratuita para que siga generando impacto.
Dado el volumen de ropa que manejamos, usamos mucha tecnología en toda nuestra operación para poder hacerlo consistente y eficiente a escala.
Desde siempre los socios fundadores se dedicaron a vender sus artículos usados. No sólo por obtener un “piso” para invertir en la nueva raqueta, reloj, celular o pantalones, sino también porque creen en el valor de las cosas, en la nueva vida que se les puede/debe dar y en el impacto que tiene el reutilizar.
Así fue como el año 2014 comenzaron a darse cuenta que ellos eran de los pocos dentro de sus amigos/conocidos/familiares que lo hacían. No era que el resto no creyera en el valor de buscarle una nueva vida a sus artículos usados, sino que era demasiado el costo en cuanto al tiempo y al foco que debían invertir para recibir a cambio el precio de esos artículos (que, generalmente, era bajo). Entonces, se dieron cuenta que facilitándoles el proceso a los “vendedores” podrían ampliar la oferta para los “compradores” y, con esto, generar un impacto tremendo. El 2014 lanzaron Sensacional, plataforma intermediada para vender y comprar artículos usados en perfecto estado de guagua y poco a poco se fue convirtiendo en lo que actualmente es Vestuá, el mismo servicio pero especializado en ropa.
Inicialmente el financiamiento lo pusieron los mismos socios fundadores. Es decir, su potencial “sueldo” no lo recibían y se convertía en capital de trabajo. Mientras fue creciendo, el emprendimiento pudo acceder a ciertos (pocos) recursos que levantaron con amigos y cercanos. Posteriormente pudieron postular a CORFO y se adjudicaron un Capital Semilla y un SSAF de innovación.
Actualmente, existen distintos socios que han aportado capital para que la empresa siga creciendo, tal como Indeed VC, Grupo Prisma, algunos family office y Grupo H&M.
Vender la ropa que nuestras clientas no usan y quedarnos con un porcentaje de esas ventas, a cambio de hacer todo el trabajo para venderlo.
Hace un año lanzamos una nueva vertical B2B para empresas, donde permitimos a las marcas poder tener servicios de secondhand (vender productos de su marca reutilizados y ofrecer a su clientas que entreguen ropa para la venta), donde nosotros proveemos la infraestructura y tecnología para hacerlo posible.
Además, donamos los productos a fundaciones que permitan que la ropa siga generando impacto.
Mujeres de todo Chile. Actualmente aceptamos ropa, zapatos, carteras y accesorios de mujer.
En un futuro esperamos aceptar hombres y niños también.
Nuestro mayor competidor es no hacer algo con la ropa y simplemente dejarla guardada. La mayoría no tiene tiempo para lidiar con el problema y lo evita. Lo escuchamos una y otra vez.
Para quienes están dispuestos a hacer todo el trabajo de revisar, buscar precios, fotografiar, y un largo etcétera que involucra más tiempo, pueden usar plataformas masivas de compra y venta. Obtendrán una ganancia mayor, pero deberán realizar mucho más trabajo. Si no lo han hecho hasta ahora, posiblemente nunca lo harán.
Aún queda mucho camino por recorrer para que las personas sientan que vender y comprar ropa de segunda mano es una gran alternativa. Debemos seguir desarrollando nuestros procesos y tecnologías para llegar a más personas y con un mejor servicio.
Queremos inspirar un estilo de vida sustentable, siendo reutilizar tu ropa la puerta de entrada.
Nos gustaría vivir en un mundo donde reutilizar todo tipo de bienes sea algo completamente normal y fácil de hacer. El impacto ecológico que podemos generar logrando que esto sea culturalmente aceptado y promovido es tremendo.
Evidentemente hay un riesgo operacional en cuanto al proceso que involucra el revisar, fotografiar, publicar y almacenar productos usados. Hay personas (externas e internas), infraestructura y procesos involucrados. En ese sentido, siempre hay riesgos de caer en errores o tener algún problema que impacte negativamente en el negocio.
Por otro lado, existe el riesgo de cualquier empresa, especialmente de un emprendimiento, en cuanto a asegurar la sostenibilidad financiera. Esto se resuelve con crecimientos en la adquisición de clientas a partir de un excelente nivel de servicio ofrecido.
Nuestro objetivo es conquistar Latinoamérica, con oportunidades enormes como México y Brasil.
La dificultad para reutilizar la ropa está presente en todo el mundo, y la necesidad se está sintiendo con más fuerza en Latam, donde aún no hay soluciones tan desarrolladas ni masificadas como en Europa o USA.
En general a todos los emprendedores y emprendedoras que, de la nada y con mucho esfuerzo, crean una solución para un segmento de personas. Es un camino duro, pero a la vez satisfactorio cuando ves que tus clientas quedan felices con la solución que les planteas. Debemos seguir potenciando ese espíritu emprendedor, porque involucra valores comunes tales como la responsabilidad, la empatía, la autonomía, la meritocracia, entre muchos otros.
Como el mayor marketplace intermediado de fashion en Latinoamérica.
Cornershop. Es un servicio muy complejo y lo hacen ver muy simple. Sus fundadores son emprendedores de primera categoría que nos mostraron cómo escalar una empresa en Latam.
Sin duda que sí. Se dan muchas cosas “por sentadas”, pero la logística es excelente, los medios de pago funcionan (y compiten), la penetración de internet es alta y creciente, el ecommerce representa una oportunidad gigante y, en general, hay ánimo de darle espacio a los emprendedores para poder desarrollar sus proyectos.
En nuestro caso, ha sido un facilitador en cuanto al apoyo concreto (financiamiento) que hemos recibido de parte de CORFO. Evidentemente que nos hemos topado con complejidades burocráticas, tales como los permisos de funcionamiento, pero en general lo vemos como un aliado/facilitador. Esperamos que esto se mantenga e incluso vaya incrementando ese espíritu en el tiempo.
La mejor forma de liderar es dando el ejemplo al resto.
Además, luego de varios años emprendiendo, pasando por momentos muy buenos y muy malos, queda claro que la paciencia, disciplina y resiliencia son valores fundamentales para cualquier cosa que se quiera lograr en la vida.
Santiago y Joaquín son compañeros de colegio y se conocen desde hace más de 20 años.