Comenzó el esperado ciclo de bajas a la tasa de interés en Chile, de la mano de una inflación que ya ha mostrado signos de debilidad tras azotar con niveles no vistos en 30 años. Es que, tal como esperaba el mercado, el consejo del Banco Central decidió aplicar el primer recorte de la tasa de rectora en más de tres años, sin embargo, sorprendió con una magnitud que superó las expectativas.
La entidad presidida por Rosanna Costa optó por una baja de 100 puntos base -la mayor desde 2009-, cuando el consenso de los expertos preveía una baja de 75 puntos. Con esto, la tasa rectora quedó en 10,25% y se aleja así del nivel de 11,25% que se mantenía desde octubre de 2022, la tasa más elevada desde 1998.
Se trata de un hito relevante, el cual el mercado venía olfateando desde que en diciembre del año pasado el Banco Central optó por mantener la tasa en 11,25% tras 17 meses de alzas consecutivas, un ciclo que inició en julio de 2021, cuando la TPM se situaba en 0,5% en medio de una deprimida actividad que enfrentaba una inédita pandemia. Así, gradualmente comenzó una normalización del tipo de interés y luego una dura restricción monetaria para luchar con una todavía más dura inflación que mezclaba factores externos propios del efecto covid-19 y robustas ayudas fiscales y retiros previsionales.
Y ahora ese escenario va en retirada.
"El Consejo ha iniciado el ciclo de reducción de la Tasa de Política Monetaria (TPM) fundado en la consolidación del proceso de convergencia inflacionaria", señaló el Banco Central en su comunicado.
En ese sentido, explicó que "el escenario macroeconómico sigue siendo acorde con lo considerado en el IPoM de junio. En particular, el desempeño de la actividad y la demanda no muestra diferencias relevantes respecto de lo proyectado, aunque la inflación se redujo algo más rápido que lo previsto en el escenario central de dicho IPoM".
"El Consejo estima que, en el corto plazo, la TPM acumulará una reducción algo mayor a la considerada en el escenario central del IPoM, coherente con lo que indican las encuestas previas a esta Reunión", agregó.
De todos modos, la magnitud y temporalidad del proceso de reducción de la tasa "tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación", acotó la entidad.
En su análisis, la entidad indicó que, en el plano externo, la inflación ha seguido descendiendo, con sorpresas a la baja en un "grupo amplio de economías", entre ellas la de Estados Unidos. Eso, mientras los mercados financieros han reflejado un mayor apetito por riesgo, observándose una depreciación del dólar a nivel global, un aumento de las bolsas y una compresión de los premios por riesgo.
"No obstante, los fundamentos siguen apuntando a la necesidad de una política monetaria restrictiva en las economías desarrolladas. Los principales bancos centrales han vuelto a subir sus tasas de referencia y han dado señales que sus políticas monetarias se mantendrán en terreno restrictivo por un tiempo prolongado", agregó.
"El Consejo estima que, en el corto plazo, la TPM acumulará una reducción algo mayor a la considerada en el escenario central del IPoM, coherente con lo que indican las encuestas previas a esta Reunión".
Banco Central
En este escenario, continuó, "el impulso externo que recibirá la economía chilena se mantendrá acotado, con débiles perspectivas de crecimiento mundial tanto para este como para el próximo año".
A su vez, consideró que los movimientos del mercado financiero local siguen alineados con expectativas de que la política monetaria reducirá su nivel de restricción. "Las tasas de interés de corto plazo han continuado cayendo, el tipo de cambio se depreció y el IPSA acumuló ganancias significativas. Por su parte, las tasas de largo plazo han tenido movimientos menores. El crédito bancario sigue acotado".
Además, el Central expuso que, en general, la actividad local y la demanda siguen evolucionando acorde con lo esperado.
Por último, indicó que "la inflación total y subyacente se han reducido más rápido que lo previsto en el último IPoM. En junio, la inflación total descendió a 7,6% y la subyacente cayó a 9,1% anual. Las diferencias se dieron mayormente en el componente de bienes. Respecto de las expectativas de inflación a dos años plazo, tanto la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) como la Encuesta de Operadores Financieros (EOF) se encuentran en 3%".