Distintas fueron las sensaciones que manifestaron destacados economistas respecto a las malas señales económicas que ha entregado China durante las últimas semanas. Algunos comparten la preocupación por las repercusiones en Chile, mientras que otros son más optimistas dado a que estamos en "un súper ciclo del cobre".
Sin embargo, hay un diagnóstico común: El gigante asiático difícilmente seguirá creciendo como lo venía haciendo y su expansión del PIB no pasará el 5% este año, pero hay coincidencias en la necesidad de adaptarse y expandir la cartera de mercados.
Pero, ¿cuál es ese cóctel de malas noticias? Entre los más recientes es que, primero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del gigante asiático registró una baja de 0,3% interanual al séptimo mes del año, dejando entrar a la deflación. Segundo, el Índice de Precios a la Producción (IPP) se contrajo 4,4% en julio, retrocediendo por décimo mes consecutivo y más rápido que la caída prevista de 4,1%.
Con esto, China se convirtió en la primera economía del G20 que informa un desplome interanual de los precios desde la última lectura negativa del IPC general de Japón en agosto de 2021.
Además, se evidenció la poca actividad económica ya que el segundo trimestre, el Producto Interno Bruto (PIB) creció a un ritmo más lento de lo esperado de 6,3% en comparación con el mismo período del año anterior.
A eso se suma el desplome del comercio exterior, esto porque los envíos al extranjero cayeron un 14,5% el mes pasado respecto al año anterior, la peor caída desde febrero de 2020, mientras que las importaciones se contrajeron un 12,4%.
También, la inversión extranjera en China cayó al nivel más bajo en 25 años en el segundo trimestre.
Por último, otro factor que ralentiza la economía es la grave crisis del sector inmobiliario chino. Así, durante los tres primeros meses del año, la inversión en promoción inmobiliaria cayó 7,9%, mientras que las cifras de ventas de propiedades comerciales mostraron un descenso de 5,3% medidas por área de suelo, un indicador que ya se había desplomado un 24,3% en 2022.
A esto se sumó que este lunes la acción del promotor Country Garden, uno de los mayores grupos inmobiliarios de China, perdió más de 15% en bolsa, generando preocupación en los mercados.
Su situación es una consecuencia directa de una crisis sin precedentes en el sector inmobiliario.
El grupo figura en la lista de Forbes de las 500 mayores empresas en el mundo y su presidenta, Yang Huiyan, era hasta hace poco la mujer más rica de Asia.
Country Garden, que presumía de solidez financiera, no pudo la semana pasada saldar dos rembolsos de intereses de préstamos.
El grupo dispone de un plazo de gracia de 30 días y podría caer en suspensión de pagos en septiembre si no logra pagar. La empresa anunció de forma inesperada este fin de semana que suspendía las cotizaciones de una decena de obligaciones a partir de este lunes.
El grupo estimaba su deuda a alrededor de 1,15 billones de yuanes (US$159.000 millones) a finales de 2022. Para la agencia Bloomberg la cifra es de unos 1,4 billones de yuanes (US$193.000 millones).
¿Qué dicen los expertos?
Con todos los factores arriba de la mesa, para Tomás Izquierdo, economista y gerente general de Gemines, dentro de las razones está "la gran inversión asociada a la producción industrial, eso está disminuyendo, el flujo porque China ya no es barato. Hoy tiene costos de producción parecidos a los de México y por lo tanto, el crecimiento de la producción industrial de las grandes multinacionales ya no se está produciendo en China. No es que esté saliendo de China pero tampoco están invirtiendo en China".
"Entonces los chinos consumen poco y ahorran mucho, y eso hoy les está pasando la cuenta, ellos necesitan motivar el consumo interno para por lo menos crecer a partir del consumo interno, sector servicio, etc. Y eso no lo están logrando", agregó.
En tanto, Cecilia Cifuentes, economista y directora del Centro de Estudios Financieros ESE Business School, consideró que la causa principal es el problema demográfico, "porque todos los países están con el decrecimiento de la población pero en China ese proceso está siendo acelerado por lo que fue la política de un hijo".
En ese sentido, explicó que para ellos, frente a ese proceso que se iba a dar en forma natural, "lo aceleraron a través de la política pública y lo han tratado de revertir pero ya está demostrado que es difícil porque finalmente se produce un cambio cultural".
A eso, según Cifuentes, se suma "el cambio en el enfoque económico global que está dando el gobierno de Xi Jinping. Él está en una estrategia también no cíclica, sino que esto es un tema estructural de mayor control del Estado. Y eso inevitablemente va ir unido a un menor crecimiento".
Mientras que el ex presidente del Banco Central, Vittorio Corbo, sostuvo que China está sufriendo varias cosas. Entre ellas, que tiene un problema grande en el sector inmobiliario, la cual consideró que es "una complicación que todavía no ha resuelto".
Además, enfatizó en que "durante la pandemia no hubo programas de apoyo a las familias, así que se comieron gran parte de sus ahorros. Entonces la situación patrimonial de las familias es complicado".
Así, concluyó con que China está sufriendo "el problema inmobiliario, segundo el consumo interno que ha costado que repunte, y que el peor problema es que su mercado interno se ha complicado porque las exportaciones llevan varios meses cayendo".
¿Cuál es el impacto para Chile
Por su parte, respecto a cómo este conjunto de cifras negativas en China repercutirá en Chile, hay opinión dividida.
Por ejemplo, el ex ministro de Hacienda, Eduardo Aninat sostuvo que las noticias que han surgido en China en el último mes y medio "son muy preocupantes, porque China es el primer o segundo mercado para una cantidad de exportaciones considerable de Chile".
Para Aninat, además de la relevancia del gigante asiático en exportación, consideró que "en segundo lugar, es un socio de inversiones importante y tercero, es el país que mueve el Asia". Entonces, explicó que si "China llegase a caer, cae el Asia de nuevo. Recuerdo algunos períodos pasados". De todas formas, subrayó que "no podemos ser catastrofistas todavía".
"Mientras ellos bajen el ritmo de gasto, nosotros vamos a bajar el ritmo de exportaciones, no será cero, pero va a ir bajando. Hay una amenaza que no estaba en el horizonte, que no estaba hace tres meses. Pero ahora está"
Eduardo Aninat, ex ministro de Hacienda
Igualmente el economista enfatizó en que lo que ocurre "
es muy preocupante".
De esa forma, explicó que "mientras ellos bajen el ritmo de gasto, nosotros vamos a bajar el ritmo de exportaciones, no será cero, pero va a ir bajando. Hay una amenaza que no estaba en el horizonte, que no estaba hace tres meses. Pero ahora está".
Mirada similar tiene Cifuentes. La economista cree que "la situación es preocupante porque a mi juicio esto no se trata de un problema cíclico en China sino que tiene un fundamento estructural".
Por eso, remarcó que es bien claro el efecto en Chile porque China "es nuestro principal socio comercial para las exportaciones y para las importaciones, aquí el efecto se produce por el lado de las exportaciones porque fue un gran impulsor de demanda en nuestros bienes y ese impulsor ahora va a crecer más lento".
"La situación es preocupante porque a mi juicio esto no se trata de un problema cíclico en China sino que tiene un fundamento estructural"
Cecilia Cifuentes, economista y directora del Centro de Estudios Financieros ESE Business School
Mientras que para Izquierdo, China será una economía que va a crecer por debajo del 5%.
Dicho eso, planteó: "¿Cómo impacta eso a Chile? No tanto, porque si es que lo que pasara fuera que China no es reemplazado por otras plazas, sí estaríamos complicados, pero está siendo reemplazado por Vietman, Indonesia, India y Filipinas y lo más importante de todo es que estamos frente a un súper ciclo del cobre".
En esa línea, afirmó que "la economía mundial no está creciendo tan rápido pero la demanda o la intensidad de uso de cobre a nivel mundial es hoy mucho mayor y será mayor hacia adelante de la que era históricamente, por el cambio a energía limpia".
"Cada vez vamos a depender menos de China porque el incremento en la producción industrial a nivel global se está produciendo en otros lados. Entonces si es que China es reemplazado por otros, bueno da lo mismo venderle a China o a Indonesia, lo importante es vender cobre", añadió.
"Una coyuntura que en otros tiempos hubiera sido muy compleja para Chile pero que esta vez nos está golpeando muy marginalmente porque nuestro términos de intercambio siguen estando por allá arriba"
Tomás Izquierdo economista y gerente general de Gemines
Dicho eso, consideró que es "una coyuntura que en otros tiempos hubiera sido muy compleja para Chile, pero que esta vez nos está golpeando muy marginalmente porque
nuestro términos de intercambio siguen estando por allá arriba".
Opinión que compartió Joseph Ramos, economista y académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile. Para él, las últimas noticias "son de cierta debilidad en la economía china".
"No es alarmante pero hay que tener los ojos puestos en eso porque podría ser serio"
Joseph Ramos, economista
"Creciendo por debajo de lo que era su pasado y con algunos potenciales signos de deflación en precios cayendo en lugar de subir, lo cual es sintomático típicamente de una demanda interna débil", expresó.
Pese a esa afirmación, manifestó que "no es alarmante pero hay que tener los ojos puestos en eso porque podría ser serio".
En esa misma línea, puso paños fríos y subrayó que "no hay nada por lo cual ser catastrofista o sea el precio del cobre sigue alto, las exportaciones de Chile siguen buenas, o sea, creo que catastrofista es solo alguien que tiene la bola de cristal que ve el desastre que viene".
"No hay signos de colapso ni nada por el estilo en este momento. Lo que sí es para nosotros es bueno una economía robusta, pero en este momento tiene estos signos", argumentó.
Mientras que para Corbo, el presente de China "está en una situación difícil", lo cual consignó que "para nosotros es preocupante en el sentido de que es nuestro principal mercado de exportación, entonces estamos observando una China desacelerada sin ninguna duda".
"Yo creo que tenemos casi que olvidarnos del crecimiento de China más allá del 4,5% para la próxima década, lo cual es miserable respecto a lo que era antes, pero no es malo"
Vittorio Corbo, ex presidente del Banco Central
"Yo creo que tenemos casi que olvidarnos del crecimiento de China más allá del 4,5% para la próxima década,
lo cual es miserable respecto a lo que era antes, pero no es malo", complementó.
Dicho eso, el ex presidente del Banco Central planteó que la situación del gigante asiático puede ser una oportunidad. "Yo creo que eso da mucha más razón para ir buscando elementos de cómo uno le da estímulo a la economía internamente", dijo.
"Ahí la mejor receta es trabajar por el lado de la oferta, o sea, destrabar proyectos de inversión, reducir la permisología para que se acelere el proyecto interno para esa forma ayudarnos a ir retomando dinamismo en forma sostenible", cerró.