El lunes el Congreso vivirá una jornada clave, y es que se deberá votar la ley corta de Isapres que busca darle viabilidad al fallo de la Corte Suprema por tabla de factores -que entra en vigencia el domingo- . Sin embargo, la iniciativa que recientemente salió de la comisión mixta y que impulsa el Gobierno ha sido foco de una serie de reparos e, incluso, descuelgues de algunos parlamentarios oficialistas.
En ese contexto es que algunos expertos no han esquivado la oportunidad para exponer su mirada crítica. Si bien reconocen que el proyecto como está permitirá por algún tiempo que las Isapres puedan seguir operando, señalan que la deuda de más de US$1.000 millones que deberán devolver las aseguradoras en un plazo de 13 años por cobros en exceso será pagada por los afiliados ¿Cómo? Por medio de las fuertes alzas en los precios de los planes de salud que contempla la ley corta para equilibrar las finanzas de las Isapres.
Un "perdonazo" es el concepto que se ha instalado. Algo que hoy fue negado tajantemente por el superintendente de Salud,
Víctor Torres, quien -con o sin ley- deberá emitir una circular con el marco para dar curso al fallo de la Corte Suprema y cuyas reglas son justamente las contempladas en la ley corta cuyo trámite fue, en buena parte, liderado por Torres.
"No logro entender a quienes dicen que esto es un perdonazo", subrayó Torres esta mañana en Radio Pauta. Pero hay varios técnicos que no coinciden que él, como el ex superintendente de Salud, Héctor Sánchez.
En entrevista con
EmolTV Sánchez explicó que el proyecto de ley corta establece que, una vez comience a regir,
habrá un alza extraordinaria de los planes de salud de hasta un 10%. Junto con ello, se extendió el criterio usado en 2024 para definir el Índice de Costos de la Salud (ICSA) a los años 2025, 2026 y 2027 o hasta que exista una nueva ley.
Es decir, las subidas anuales, así como ocurrió este año, serán más pronunciadas al menos durante los próximos tres años.
"Se está traspasando a las personas el mayor costo" que tendrán las Isapres por la deuda, aseguró el ahora director del Instituto de Salud Pública de la UNAB. "Si eso no es perdonazo, yo no sé lo que es", manifestó.
"En el fondo se está trasladando a las personas el pago directo de esta deuda, de una u otra forma. Y esa situación creo que es importante tenerla presente. En la práctica no es inocuo lo que están haciendo", añadió Sánchez.
También advirtió que, producto de esto, "la gente va a reaccionar", añadiendo que "en definitiva, se va a generar no solo el descontento de la población, sino que otro efecto: la gente se va a empezar a ir. Creo que la fuga es imprescindible que exista. Cada vez que ha habido un aumento importante de precios, hay fugas importantes de cartera. Quienes se van son los más jóvenes y los sanos".
