PARÍS.- Es una ausencia cada vez más difuminada. A fines de 2006 la pregunta pasaba por saber cuándo volvería Guillermo Coria a luchar con los mejores, pero medio año después la impresión en el tenis es que el argentino jamás volverá a ser el que fue.
Y eso, si es que vuelve a jugar. El diario deportivo francés "L'Equipe" escribió recientemente que Coria "atraviesa un período negro", y no exageraba.
Coria, que llegó a ser el número tres del mundo en mayo de 2004, figura esta semana 344 en la clasificación. No juega torneos desde septiembre de 2006 y cambió cuatro veces de entrenador el año pasado. Desde el entorno del argentino se anunció repetidas veces su regreso al tenis en diferentes certámenes a lo largo de 2007, cosa que hasta el momento no sucedió.
"No puedo decir imposible, porque a un jugador de su talento no se lo puede menospreciar, pero cada día que pasa y no está en la cancha es algo que pierde", dijo el español Carlos Moyá durante su reciente participación en Roland Garros.
Moyá, que en los tiempos en que Coria era el jugador dominante sobre arcilla, entre 2003 y 2004, tenía una buena relación con el argentino, cree que Coria "siempre ha estado aislado por su manera de ser", y que debería haber pedido ayuda a sus colegas.
"La última vez que lo vi fue en el US Open. Creo que con ningún jugador ha asumido el problema, ni ha ido a nadie... Su relación con los demás jugadores es un poco diferente a la del resto, él siempre ha sido más cerrado, más de su equipo. Pon que a mí me pasa esto, tengo gente a la que poder acudir, y jugadores mismos que me darían una mano".
El ex número uno del mundo no entiende que Coria no se deje ayudar por sus compañeros.
"Todo jugador podría haber ido a otro jugador y comentarle lo que pasa, lo que pasa por su cabeza, el problema que está teniendo y recibir ayuda. En ese aspecto él no lo ha querido hacer, tiene su equipo, claro, pero no ha tenido la perspectiva de afuera, que puede ayudar".
"No sé si ha habido muchos que hayan pasado por eso", añadio Moyá, refiriéndose al problema del argentino con las dobles faltas, que terminaron arruinando el resto de su juuego y su confianza.
"Exceptuando lo de Cañas, que no es un jugador típico, es muy difícil volver. 'Willy' lo dejó estando arriba, no tuvo ninguna lesión y ha vuelto, pero lo de él no es común. Coria lo ha dejado porque su nivel ha bajado, por su servicio, por lo mental, lo que sea...", se lamentó el español.
Cañas, desde esta semana el nuevo número uno argentino, no tiene idea de cuál es la situación de su compatriota.
"No sé qué pasó con Guillermo. Entrené con él dos meses antes de Miami, y después nunca volví a saber nada".
Lo mismo le sucede a Gastón Gaudio, campeón de Roland Garros 2004 y tradicionalmente enfrentado a Coria: "Le va a ser difícil volver. Tiene un tenis increíble, pero le va a ser difícil. No sé qué está haciendo".
El español Tommy Robredo coincide: "Hace mucho tiempo que no se lo ve, no puedo opinar. No sé si volverá a jugar al tenis o no, es una cosa de él".
El argentino entrena actualmente en Venado Tuerto, su pueblo, con el ex tenista Hernán Gumy. Curioso caso el de Gumy: hasta unos meses entrenó también al brasileño Gustavo Kuerten, que apenas pudo jugar unos pocos partidos en su regreso al circuito.
