WASHINGTON.- Las ventas minoristas se desplomaron 2,4% en septiembre, la mayor pérdida registrada en los casi 10 años en que se han llevado registros, debido a los ataques terroristas que afectaron enormemente al sector de la economía que había venido evitando una recesión.
El departamento de Comercio divulgó el viernes el informe que muestra que el gasto de los consumidores descendió en una amplia gama de productos, desde autos hasta ropa. La mayoría de los estadounidenses permaneció frente al televisor tras los ataques del 11 de septiembre, en vez de aventurarse a los centros comerciales.
Mientras, el departamento del Trabajo informó que la inflación a nivel mayorista subió un 0,4% en septiembre, cifra mayor que la esperada, lo cual reflejó un segundo mes consecutivo de grandes incrementos en los costos de los energéticos.
Ahora, muchos economistas creen que la economía -debilitada antes de los ataques- ha caído en una recesión provocada por el agudo descenso en el gasto de los consumidores.
Sin embargo, los analistas advierten que el desplome en las ventas de septiembre probablemente hace que la severidad del revés económico parezca mayor porque los consumidores ya volvieron a las tiendas y las ventas de autos aumentaron este mes gracias a las ofertas de financiamiento con cero intereses.
Los economistas se sintieron motivado por los resultados de un sondeo hecho por la universidad de Michigan, según el cual la confianza de los consumidores repuntó a mediados de octubre, a 83,4, en relación con 81,8 de fines de septiembre.