BUENOS AIRES.- El ministro de Economía argentino, Roberto Lavagna, anunció que el jueves llegaría al país la esperada misión negociadora del Fondo Monetario Internacional (FMI), después de sucesivas postergaciones que habían provocado inquietud en medios gubernamentales y financieros.
Según la agencia privada Noticias Argentinas (NA) y el canal de televisión Todo Noticias, Lavagna hizo el anuncio a un grupo de periodistas brasileños. Les informó que la misión estará encabezada por John Thorton.
Poco antes del anuncio de Lavagna, el jefe del gabinete de ministros, Alfredo Atanasof, había asegurado a la prensa que no debía alarmar la demora en anunciarse la llegada de la misión, que negociará el otorgamiento de asistencia financiera a Argentina.
La prensa local, especialmente los diarios económicos, habían asegurado el martes que la demora reflejaba la supuesta desconfianza del FMI hacia el Presidente Eduardo Duhalde y el ministro Lavagna.
El ministro de Economía mantuvo una comunicación en la tarde del lunes con la subdirectora del Fondo, Anne Krueger, quien le pidió nuevos informes y otras exigencias que tendría que cumplir el Gobierno de Duhalde.
El Gobierno argentino había ya satisfecho las condiciones oportunamente planteadas por el FMI: la firma de un acuerdo fiscal con las provincias, para que redujeran sus déficits, modificaciones a la legislación sobre quiebras y la derogación de la llamada "Ley de Subversión Económica", muy resistida por los banqueros, especialmente de entidades extranjeras.
El Gobierno había anunciado las primeras medidas para que los ahorristas, atrapados por el llamado "corralito financiero" desde diciembre, comenzaran a salir del mismo, a través de un sistema de bonos.
El portavoz presidencial, Eduardo Amadeo, anticipó el martes que Duhalde accederá a una de las nuevas exigencias del FMI y que vetará un artículo de la ley que derogó la legislación sobre subversión económica. Ese artículo introducía, en el Código Penal, algunas de las penalidades que contenía la ley derogada.
Hasta poco antes Duhalde se había negado al veto, para disipar cualquier sospecha de que accedía a consagrar la impunidad para los llamados "delitos de guante blanco".
Atanasof declaró en rueda de prensa que "no hay que alarmarse en absoluto por las diferencias con las autoridades del FMI. Por supuesto, quisiéramos acordar ya, porque cada día que pasa el país se atrasa en el camino de crecimiento, pero vamos a esperar. Hay que ser pacientes, hoy estamos a las puertas de una negociación para volver a insertarnos en el mundo".
Recordó que "se trata de una negociación y en ese marco las partes hacen sus planteos. El FMI lo está haciendo y Argentina también tiene su estrategia para enfrentar este proceso".
Atanasof dijo esta mañana que el Gobierno argentino no está preocupado por la promoción de Anoop Singh como nuevo director del área del hemisferio occidental del FMI.
En medios gubernamentales y financieros locales se atribuye a Singh, que estaba a cargo de las negociaciones con este país, una posición muy dura frente a la Argentina y de ser el principal impulsor de la demora en comenzar las conversaciones.
La semana pasada el propio ministro Lavagna se había quejado ante el director del FMI, Horst Köhler, por la actitud supuestamente inamistosa de Singh hacia Argentina.