Gobierno firma decretos para normas de emisión de centrales termoeléctricas y de material fino

PUCHUNCAVÍ.- Esta mañana, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, y la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, firmaron los decretos que regulan las nuevas normas de emisión para termoeléctricas y las de material particulado fino 2,5.

Tras la actividad que se llevó a cabo en el Puchuncaví, la titular de Medio Ambiente señaló que "ahora vamos a enviar el texto a la Contraloría, y esperamos que esta ley esté publicada en tres o cuatro meses más".

Benítez destacó que "estas normas son igual de exigentes que las de la Unión Europea. Estamos con los más altos estándares a nivel mundial".

En tanto, el presidente Sebastián Piñera llamó a los parlamentarios a “apurar el tranco” en la tramitación de los nuevos Tribunales Ambientales, y reiteró el desafío energético que enfrenta Chile para producir la energía necesaria que ayude al desarrollo económico.

La norma para centrales termoeléctricas permitirá regular las emisiones de material particulado y otras sustancias contaminantes (óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre, entre otros) presentes en la operación de este tipo de generación eléctrica.

Asimismo, establece un límite a la contaminación atmosférica provocada por la combustión en unidades generadoras térmicas, especialmente aquellas que utilizan combustibles más contaminantes, como diésel y carbón.

A través de la norma, todas las centrales termoeléctricas, nuevas y ya existentes en el país, deberán mejorar sus procesos tecnológicos a fin de minimizar sus emisiones.

Según los antecedentes conocidos, en general, el proyecto mantuvo las directrices de lo revisado por el  Comité de Ministros por la Sustentabilidad, en términos de dar un plazo de 4 años para reducir las emisiones de dióxido de azufre y 5 años para el óxido de nitrógeno, aunque redujo el plazo de 3 años a 2,5 años (es decir, seis meses) para adecuarse a las nuevas normas sobre material particulado.

El material particulado 2.5, por su parte, es considerado el contaminante que más afecta la salud de la población.