PARÍS.- Reducir las desigualdades y relanzar la actividad económica en forma simultánea es posible, si se realizan reformas en los mercados de trabajo, en los sistemas impositivos y en la educación de alto nivel, según un informe publicado hoy por la OCDE.
"La creciente desigualdad es uno de los mayores riesgos del futuro para la prosperidad y la seguridad", aseguró en un comunicado el economista jefe de la OCDE, Pier Carlo Padoan, quien señaló que los gobiernos tienen el reto de "poner a la gente a trabajar y reducir la ascendente diferencia de ingresos".
Reducir diferencias entre contrato fijo y temporal
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), las reformas gubernamentales para paliar los efectos de la crisis deben reducir "la diferencia de la protección laboral de los trabajadores temporales y los que tienen contrato fijo", que es de cerca del 25% en términos de remuneración.
Además, aplicar medidas en ese sentido impulsaría la contratación, agregó la organización con sede en París, que, en materia de impuestos, apuesta por que se eliminen las exoneraciones fiscales que benefician a los más acaudalados.
En materia de mujer, la OCDE subrayó en su informe que una atención a los menores más accesible produciría un impulso similar en los ingresos de la mujer trabajadora, además de facilitar su acceso al mercado laboral.
Por último, las reformas educativas, agregó en su informe la organización que dirige el mexicano Ángel Gurría, deberían centrarse en las comunidades de inmigrantes y en los grupos con más dificultades socioeconómicas, lo que les aportaría "un impacto a largo plazo en sus oportunidades de empleo, ingresos e igualdad".