SANTIAGO.- El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, reiteró enfáticamente esta mañana que el Gobierno no va a eliminar el impuesto específico que afecta al precio de los combustibles.
El titular de Hacienda dijo que "sin duda hay una preocupación por los precios de los combustibles, y el efecto que esto tiene en los consumidores. Los combustibles forman parte importante del presupuesto de muchas personas, inciden en la actividad económica y en el costo de la vida".
Larraín expresó que le encantaría tener precios de los combustibles más bajos "pero tenemos que ser responsables. Lo hemos repetido y no tengo problema en hacerlo nuevamente: no vamos a eliminar el impuesto específico a los combustibles", agregó.
El secretario de Estado explicó que el impuesto específico es un tributo "que tiene una justificación muy clara desde el punto de vista de la congestión, de la contaminación, y también desde el punto de vista de la progresividad, ya que el 70% lo paga el quintil de mayores ingresos".
Respecto a la entrada en operación del Sistema de Protección al Contribuyente ante las variaciones en los Precios Internacionales de los Combustibles (Sipco), Larraín dijo que han operado "dentro de lo que ha sido posible hacer y, hasta hace muy poco, no teníamos la posibilidad de actuar", dijo.
Por ello, el ministro de Estado destacó que se haya podido modificar los parámetros con los que opera el Sipco -dentro del margen que permite la Ley-, lo que redundó en que esta semana los precios de los combustibles no suban $14 como se esperaba, sino que $1, en promedio.
Larraín espera baja en la inflación durante 2012
El ministro de Hacienda sostuvo que la inflación en Chile durante el presente año será "sustancialmente menor" al 4,4% registrada en 2011.
"Nosotros estamos confiados en que este año la inflación va hacer sustancialmente menor a la del año pasado. Ya hemos tenido una buena partida con el IPC de enero (0,1%)", dijo.
Larraín Indicó que el país no tiene como aislarse de lo que ocurre en el mundo, y del impacto que ello tenga en los precios, "porque somos una economía integrada y, en algunos casos, muy dependientes de algunos precios externos".
"Esperamos que la desaceleración de la economía mundial ayude (a bajar la inflación externa), pero puede haber efectos puntuales de precios de commodities; por lo tanto, vamos a estar siempre atentos a la inflación, en un trabajo coordinado con el Banco Central. Desde el punto de vista del Gobierno, la política fiscal ha estado apoyando el proceso", añadió.