La Canciller Angela Merkel ha rechazado los intentos de los mandatarios de Francia, Italia y España de convencer a Alemania de aceptar medidas más rápidas para atenuar la inquietud de la deuda soberana en los mercados financieros.
EfeLONDRES.- Alemania se enfrentará esta semana a un bloque cada vez más unido de países de la zona euro que reclaman políticas más ambiciosas para salvar la unión monetaria, en tanto los dirigentes europeos se preparan para una cumbre que fijará el rumbo para la conservación o el fin de la moneda.
Conforme crece la preocupación por los sistemas bancarios y las finanzas, los mandatarios de España e Italia han sumado sus voces a quienes exhortan a que se tomen medidas más decididas en un contrapunto con el enfoque más gradual de Alemania para resolver la crisis, que ya lleva dos años y medio. Los líderes de la Unión Europea asistirán a reuniones previas a la cumbre para trabajar en la reducción de sus diferencias antes del encuentro del Consejo Europeo del 28 y 29 de junio en Bruselas.
"Estamos demasiado cerca del borde del precipicio para sentirnos cómodos y el tiempo para hacer grandes cambios es terriblemente corto", escribió Eric Nielsen, economista jefe de UniCredit SpA en Londres, en una nota enviada a los clientes ayer.
La canciller Angela Merkel la semana pasada rechazó los intentos de los mandatarios de Francia, Italia y España de convencer a Alemania de que acepte medidas más rápidas para atenuar la inquietud por la deuda soberana en los mercados financieros, delineando divisiones con respecto a una mayor integración de la zona euro. La fricción entre Alemania y el resto de Europa quedó de manifiesto el 22 de junio cuando el Bundesbank se opuso a los planes del Banco Central Europeo de ayudar a los bancos en apuros.
Los rendimientos retroceden
El costo del endeudamiento para España e Italia la semana pasada se redujo al conocerse versiones de que los líderes de la región euro tomarían más medidas. El rendimiento del bono español a diez años cayó a 6,38% el 22 de junio tras haber trepado por encima de 7% durante la semana. Los rendimientos italianos comparables cayeron a 5,8% luego de llegar a 6,17% el 18 de junio.
En una reunión cuatripartita del 22 de junio en Roma, Merkel se topó con un frente unido formado por sus tres interlocutores –el primer ministro italiano Mario Monti, el presidente francés François Hollande y el primer ministro español Mariano Rajoy- que proponía hacer que los fondos de rescate de la zona euro fueran más flexibles. Merkel la semana pasada rechazó un plan de Monti para usar los fondos –el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera o el Mecanismo Europeo de Estabilidad- para comprar bonos y expresó su oposición a recapitalizar a los bancos en forma directa.
Los contribuyentes alemanes no podían estar de acuerdo con canalizar los fondos directamente a los bancos de otros países porque no tienen control sobre la forma en que se usará el dinero, les dijo Merkel a los periodistas en Roma. Como canciller, ella sólo tenía esas facultades sobre los bancos alemanes. "Se tendría aquí un enorme problema", señaló. Merkel viajará a París el 27 de junio para una reunión pre-cumbre con Hollande.
Merkel está agravando la crisis europea porque los países necesitan crecimiento, no austeridad, para pagar su propia deuda, explicó ayer el multimillonario inversor George Soros en una entrevista en Bloomberg Television.
"Merkel aparece como una dirigente fuerte", declaró Soros, de 81 años, en una entrevista con Francine Lacqua de Bloomberg Television en su casa de Londres. "Lamentablemente, ha guiado a Europa en la dirección equivocada".