VIENA.- La OPEP ha revisado ligeramente al alza su pronóstico sobre la demanda petrolera mundial en 2012 y 2013, hasta cifrarla en 88,72 y 89,52 millones de barriles diarios, pero advierte del riesgo de una caída del consumo de crudo debido a los altos precios del barril y la crisis de la zona del euro.
En su informe mensual, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha elevado así en 30.000 barriles diarios sus propias estimaciones de hace un mes.
Con ello, vaticina un crecimiento anual de la demanda petrolera del planeta del 1,02% y del 0,91% para este año y el próximo.
Sin embargo, los expertos de la organización advierten de que las estimaciones para 2013, basadas en un crecimiento de la coyuntura mundial del 3,2% y un nivel de precios del crudo como el actual, están rodeadas de mucha incertidumbre, pues "la imagen económica es vaga y el horizonte lleno de turbulencias".
Estas previsiones tienen por ello un "potencial de riesgo a la baja mayor que al alza", especialmente debido a la crisis de la zona del euro que está impactando en otras regiones y puede afectar el crecimiento de la economía mundial.
Pero también un aumento en los "petroprecios" puede mermar la demanda de "oro negro".
El valor del barril referencial de la OPEP se apreció en julio casi un 6% respecto a junio, al venderse a una media de 99,55 dólares, y ha continuado al alza en lo que va de agosto, hasta cotizar ayer a 108,36 dólares.
Su promedio anual se sitúa en 110,03 dólares, un récord histórico que supera la media anual máxima registrada el año pasado, de 107,46 dólares.
También el crudo Brent y el de Texas (WTI) se encarecieron en julio, cuando su valor medio superó en 7,40 y 5,46 dólares al del mes anterior.
Entre los factores que han impulsado esta tendencia alcista, la OPEP resalta, en primer lugar, "la reaparición de las tensiones geopolíticas", en alusión a las sanciones impuestas a Irán debido a su polémico programa nuclear.
El 1 de julio entró en vigor el embargo petrolero de la Unión Europea (UE) a las importaciones de crudo desde Irán, segundo productor petrolero de la OPEP y cuarto del mundo, dentro de las sanciones internacionales que han limitado las posibilidades comerciales de la República Islámica.
Según los datos publicados en el informe de hoy, la producción de crudo de Irán cayó en julio en 173.000 barriles diarios, hasta los 2,817 millones de barriles diarios. En total, los doce países miembros de la OPEP bombearon 31,195 mbd, 156.800 bd menos que en junio.
No obstante, la producción del grupo superó la cuota de 30 mbd que ratificaron los ministros de la OPEP en su última reunión, en junio en Viena.
Pero los precios se vieron presionados al alza también por otras razones, como la ola de calor en el hemisferio norte que ha aumentado el uso del aire acondicionado y una mayor demanda en las economías emergentes de Asia, así como por problemas de producción en el Mar del Norte.
Estos elementos han compensado la presión a la baja causada por la crisis en Europa, la única región de la que la OPEP no espera un aumento del consumo petrolero, sino un descenso.
"La crisis de la deuda europea aún ensombrece la perspectiva económica del continente. El sentimiento negativo se amplía a través de la región, llevando a una menor actividad económica y por lo tanto reduciendo el uso de energía en todos los sectores. El consumo europeo de crudo se contrajo en junio por décimo mes consecutivo", resalta la OPEP.
Recuerda que de momento, la menor demanda europea está compensada por el creciente consumo de China, India, Oriente Medio y América Latina, si bien la crisis de la zona del euro ha comenzado a afectar las economías de estas regiones también, ralentizando su crecimiento.