MADRID.- El presidente español, Mariano Rajoy, admitió hoy que la subida del IVA que empezó a regir hoy es "dolorosa" pero la defendió porque servirá para que el Estado "financie los servicios públicos".
"Me hago cargo de que es un sacrificio que llega en un momento muy complicado", apuntó el líder conservador, tras explicar que ha tomado esta medida porque resultaba "imprescindible" para afrontar la crisis y abordar la caída de ingresos de las administraciones públicas.
La subida del IVA "es dolorosa", implica "un sacrificio" pero "no caerá en saco roto", apuntó, mientras desde el partido de la oposición (PSOE, socialista) y los gremios le lanzan duras críticas.
El alza del IVA en España, cuya tasa principal pasa de 18% a 21%, anunciada en julio por el gobierno de Rajoy, entró en vigor este sábado en el marco de una política de rigor sin precedentes destinada a reducir el déficit público a 6,3% del PIB.
Con este aumento de impuestos directos, el ejecutivo español espera recaudar 9.500 millones de euros, en el marco de un feroz plan de recorte que contempla ajustes de 102.000 millones de euros hasta 2014.
Las medidas fueron impuestas a España por Bruselas a cambio de una suavización de su objetivo de reducción del déficit hasta un 6,3% del PIB en este año, un 4,5% en 2013 y un 2,8% en 2014.
"Si hubiera habido una alternativa, creen que no habría sido el primer interesado en adoptarla?", se preguntó Rajoy con retórica.
Asimismo, sostuvo que las subidas fiscales puestas en marcha por su gobierno, bajo presión de Bruselas, son "instrumentos excepcionales" para afrontar una coyuntura "excepcional" que "nunca deben volver a repetirse y que volverán a la situación anterior cuando las circunstancias lo permitan.
"Tengan total y absoluta certeza, si España sigue por este camino empezará a recuperar la confianza como país, demostrando que es serio y cumplidor" lo que permitirá una financiación más barata y atraer inversiones, indicó.