El ex director del FMI, Dominique Strauss-Kahn.
EfePARÍS.- ¿Las ejecutivas mujeres estarían dispuestas a trabajar con la nueva empresa consultora de Dominique Strauss-Kahn en París? La respuesta es un resonante quizá.
El ex responsable del Fondo Monetario Internacional, de 63 años, dejó el año pasado ese cargo para defenderse contra las acusaciones de haber agredido sexualmente a una camarera en un hotel de Manhattan. La causa penal fue más tarde abandonada y la presunta víctima lleva adelante un juicio civil en su contra. Por separado, fiscales de Lille, en el norte de Francia, abandonaron el 2 de octubre una investigación relativa a acusaciones de que él y otros hombres habían violado a una prostituta en Washington en 2010.
En un intento de reconstruir su carrera, DSK, como se lo conoce en Francia, inscribió el 4 de septiembre una empresa llamada Parnasse para ofrecer servicios empresariales, según muestra la documentación presentada ante el tribunal de comercio de París. Las mujeres ejecutivas discuten si Strauss-Kahn, que en su momento fue posible candidato para la elección presidencial francesa por el Partido Socialista, es alguien con quien pueden trabajar.
"Como mujer, yo estoy a favor de darle una segunda oportunidad", dijo en una entrevista Carmen Kervella, fundadora de aHeadland, una firma de estrategia de marca en París. Su empresa, según su sitio en Internet, cuenta entre sus clientes a Christian Dior, Chanel y Guerlain. "Su capacidad nunca estuvo en duda. Yo lo veo trabajando en el área de asesoramiento para grandes fusiones y adquisiciones o en relaciones entre empresa y gobierno".
Para algunas mujeres, su capacidad fue eclipsada por la sombra de las acusaciones en su contra.
"El carácter, las normas éticas, la integridad y las cualidades de liderazgo deben superar lo que pueden aportar los individuos como idoneidad y una lista de contactos con quienes mueven los hilos", dijo en una entrevista telefónica desde Washington D.C. Natasha Srdoc, co-fundadora de International Leaders'Summit.
Larga carrera
A pesar de la enorme lista de contactos que Strauss-Kahn puede haber cosechado a lo largo de sus más de 30 años de carrera, algunas personas podrían tener reservas, dijo Srdoc, cuyo foro reúne a responsables de negocios y políticos para defender reformas de libre mercado.
"Para las empresas, una asociación estrecha con personas de carácter y honestidad es importante tanto a corto como a largo plazo", dijo. "Si perdemos de vista estos requisitos previos básicos, quedamos todos relegados a bajar los niveles de exigencia".
Empresarias francesas como Nina Mitz, directora ejecutiva primera de la firma de relaciones públicas FTI Strategic Communications de París, que fue portavoz de Strauss-Kahn cuando éste estaba en el ministerio de Finanzas, aconsejó a las empresarias que estén dispuestas a pasar por alto las acusaciones –por las que Strauss-Kahn no fue condenado. "Creo que las mujeres empresarias son capaces de dejar de lado sus sentimientos personales en aras de sus emprendimientos de negocios", dijo.
"La inteligencia, el conocimiento, la creatividad y las capacidades de negociación (de Strauss-Kahn) son lo bastante excepcionales como para inducir a cualquiera, ya sea hombre o mujer, a capitalizar sus cualidades", dijo Mitz. "Las cualidades empresariales no tienen género".