FRANKFURT.- El acuerdo alcanzado en las últimas horas en Estados Unidos para evitar el denominado "abismo fiscal" impulsó hoy al alza los mercados en Asia y Europa, así como los precios del petróleo.
En el Viejo Continente, el índice europeo EurStoxx 50 ganó un 1,71% en la apertura del primer día de cotización de 2013, subiendo hasta los 2.681,09 puntos, su mayor valor desde agosto de 2011.
En Frankfurt, el Dax subió un 1,66 por ciento, hasta lograr 7.739 puntos, su mayor nivel desde enero de 2008. En Madrid, el Ibex 35 aumentó un 2,0% mientras que en París, el Cac 40 ganó un 1,70 por ciento y el británico FTSE 100 subió un 1,46%.
La cotización del euro subió además hasta los casi 1,33 dólares tras conocerse la aprobación del acuerdo por la Cámara de Representantes, para bajar después ligeramente hasta los 1,3287 dólares.
La mayor parte de las bolsas asiáticas también se beneficiaron de las buenas noticias estadounidenses, aunque en China y Japón los mercados estarán cerrados hasta el viernes.
El índice Asia Apex 50 subió un 2,42%, hasta los 920,76 puntos. En él están incluidas las 50 mayores empresas asiáticas, a excepción de las japonesas. En Bombai, el Sesex subió un 0,88% y en Seúl, el índice Kospi aumentó un 1,71%, hasta los 2.031,10 puntos. Además, el FTSE Straits Times de Singapur sumó un 1,24% mientras que en Hong Kong el Hang Seng avanzó un 2,12%.
También se incrementaron los precios del petróleo. El barril (159 litros) del Brent del Mar del norte para febrero costaba esta mañana 111,82 dólares en el mercado asiático, 71 céntimos más que al cierre de la cotización del lunes. El precio del West Texas Intermediate subió 95 céntimos, hasta los 92,77 dólares.
El acuerdo alcanzado en el Senado de Estados Unidos para evitar el "abismo fiscal" recibió hoy luz verde en la Cámara de Representantes, dos horas después de que expirase el plazo para la entrada automática el 1 de enero de una serie de subidas de impuestos a gran escala e importantes recortes en ayudas.
De esta manera se evitó en el último momento una masiva subida de impuestos para millones de estadounidenses. Los expertos temían que Estados Unidos volviera a caer en la recesión, con consecuencias negativas para la coyuntura global.