BRUSELAS- El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, pidió este martes a los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE) que agilicen la aplicación de medidas contra el fraude fiscal, ante el billón de euros que anualmente dejan de ingresar las arcas de los Estados miembros.
"Se trata de muchísimo dinero como para, simplemente, dejar que se escape", aseguró Barroso en una intervención en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo.
Según recordó el presidente del ejecutivo comunitario, ese billón de euros anuales que los socios dejan de ingresar anualmente en concepto de impuestos, equivale al doble del déficit total de todos los socios de la UE para 2012.
Otro ejemplo que sirve para ilustrar el enorme daño que supone ese agujero fiscal es, según Barroso, el que con ese billón de euros anuales se habría podido financiar el gasto sanitario de toda la UE en 2008 o el coste de la inversión en infraestructuras de energía de la UE hasta 2020.
De cara a la cumbre de mañana, Barroso aseguró que los líderes europeos tienen previsto alcanzar un acuerdo que se materialice en un futuro "compromiso político" en materia de lucha contra el fraude fiscal en la UE.
Por ello, la palabra clave es según el portugués "mejorar nuestra coordinación".
Uno de los objetivos de Bruselas es -de cara a 2015- tener listo un sistema automático de intercambio de datos fiscales.
"Mañana, en el Consejo Europeo, presionaré para lograr un compromiso político sobre un principio muy simple: que el 1 de enero de 2015 la UE tenga el intercambio automático de información para todas las formas de ingresos", comentó Barroso.
Está previsto que la semana que viene, la Comisión Europea haga una serie de recomendaciones políticas a los 27 socios comunitarios en las cuales se hará especial énfasis en la necesidad de una reforma a fondo de los sistemas fiscales nacionales y de recaudación de impuestos.
En el mismo contexto, los líderes de numerosos partidos políticos representados en el Parlamento Europeo también hicieron hoy un llamamiento a que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE asuman un "compromiso activo" en materia de lucha contra el fraude fiscal y contra la sangría que supone la evasión de impuestos.
"Tenemos, realmente, el valor y la voluntad de luchar contra la evasión de impuestos y los paraísos fiscales? Necesitamos una fuerte determinación, no sólo declaraciones", aseguró Hannes Swoboda, jefe de la bancada del Partido de los Socialistas y Socialdemócratas (S&D), la segunda fuerza en el Parlamento Europeo tras el Partido Popular Europeo (PPE).
"El fraude fiscal le cuesta a la UE muchísimo dinero, más de 1.000 millones de euros al año(...) Sólo podemos atajarlo de manera contudente y eficaz si lo hacemos a escala europea", comentó por su parte Joseph Daul, líder de la bancada del PPE.
La lucha contra la evasión fiscal ha vuelto a colocarse en la primera línea mediática con casos como el de las cuentas secretas en bancos suizos del ex ministro de Presupuesto de Francia, Jerome Cahuzac.
Por otra parte, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy aseguró hoy que la cumbre europea de este miércoles debería dar "un nuevo impulso" a las iniciativas paneuropeas contra la evasión y el fraude fiscal.
Mientras tanto, en Bruselas se reúnen desde esta mañana los ministros y secretarios de estado para la UE de los 27, con el objetivo de intentar acercar posturas de cara a la aprobación de las Perspectivas Financieras (el marco presupuestario plurianual) del bloque para el período 2014-2020, actualmente empantanadas por el bloqueo del Parlamento Europeo.
Según fuentes comunitarias, también esta previsto que analicen los documentos que los líderes europeos debatirán mañana en Bruselas. No obstante, no se prevén hoy decisiones en la materia, según comentó el ministro irlandés para asuntos europeos, Eamon Gilmore, cuyo país preside este semestre el bloque comunitario.