NUEVA YORK.- Aquí va una adivinanza que será un rompecabezas para la clase política de Washington: ¿en qué están de acuerdo los republicanos del Tea Party con los ambientalistas del Sierra Club?
La respuesta es que piensan igual respecto del apoyo a la energía solar frente al monopolio energético de las empresas tradicionales en algunos de los estados más conservadores de los Estados Unidos.
Una fracción de Georgia conocida como Green Tea Coalition, que es parte del movimiento más amplio que se opone al gobierno sobredimensionado, está dando nueva vida a los lazos republicanos con el Sierra Club que se remontan más de un siglo atrás a la labor del presidente Theodore Roosevelt para proteger el medio ambiente. Su influencia se siente en otros estados, de Arizona en el oeste a Carolina del sur en la costa este.
"Algunos dicen que esta es una alianza nefasta", dijo Debby Dooley, fundadora de la coalición y cofundadora de los Atlanta Tea Party Patriots. Ella trabaja con el Sierra Club para luchar por la energía solar y contra la nuclear en Georgia. "Coincidimos en la necesidad de desarrollar energía limpia, pero no en mucho más".
Amenaza al modelo de negocio
La alianza es un peligro para las empresas eléctricas como la división Georgia Power de Southern Co. y Arizona Public Service de Pinnacle West Capital Corp., que se oponen a la difusión de la energía solar que representa una amenaza para su modelo de negocios. Pero podría ayudar a desarrolladores de energía solar como SolarCity Corp. y fabricantes de paneles como SunPower Corp. de San José, California.
Lo que une a los ambientalistas con los grupos republicanos es la idea de que la caída de los precios de los paneles solares podría significar que los consumidores no tengan que comprar toda su electricidad a las empresas eléctricas y sus gigantescas plantas de generación centralizada.
Extraña pareja
"El enfoque de libre mercado funciona bien en los círculos republicanos, por eso puedo entender cómo se formó esa extraña pareja", dijo Frank Maisano, especialista en energía del estudio de abogados de Washington Bracewell Giuliani LLP. "Pasa a ser un argumento económico".
Los precios de los paneles solares cayeron 59% desde comienzos de 2011, a 83 centavos el watt, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg. Eso significa que la energía solar cuesta un promedio de US$ 143 el megawatt/hora en todo el mundo en este momento, por debajo de los US$ 236 del primer trimestre de 2011, según Bloomberg New Energy Finance. La energía nuclear cuesta alrededor de US$ 101 y el gas natural US$ 70, en comparación.
En Georgia, los planes de Southern de construir dos reactores nucleares en sus instalaciones de Plant Vogtle, ubicadas al sur de Augusta, cada uno con 1,1 gigawatt de capacidad, despertó las iras de la agrupación Green Tea de Dooley. Los clientes de Georgia Power ya están pagando un sobrecargo en sus facturas por el proyecto de US$ 14.000 millones, aun cuando los reactores no comenzarán a producir electricidad hasta 2017 y 2018.
"Aquí no hay competencia", dijo Dooley en una entrevista. "La energía solar es nuestra única manera de obligarlos a competir".