El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, y también vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rehn.
ReutersBERLÍN.- El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, el finlandés Olli Rehn, no cree que revista una "particular urgencia" abordar la sostenibilidad de la deuda de Grecia y la falta de financiación, en alusión a las peticiones del Gobierno de reducir los intereses de su deuda y extender el vencimiento de los préstamos de la UE antes de las elecciones europeas de mayo.
En una entrevista concedida al diario alemán 'Welt am Sonntag', Rehn argumenta que las cuestiones de la sostenibilidad de la deuda helena y las consecuencias del agujero de financiación en 2015 y 2016 "no suponen ninguna particular urgencia" y pospone cualquier decisión para a partir de este verano.
Otro condicionante que cita Rehn es el superávit primario. El Gobierno griego se remite a las palabras del ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaeuble, que, tras la cita del Eurogrupo de noviembre de 2012 en la que se acordó reestructurar la deuda helena, dijo que "cuando Grecia consiga, o esté a punto de conseguir, un superávit primario y cumpla con todas sus condiciones, consideraremos, si es necesario, nuevas medidas para reducir el total de su deuda".
En respuesta, Rehn emplaza a la decisión al Eurogrupo y a los datos de la oficina europea de estadística, el Eurostat. "Necesitamos los datos validados por el Eurostat para saber si Grecia ha registrado realmente un superávit", se justifica el comisario europeo.