El primer ministro ha reiterado que la rebaja del impuesto de sociedades es necesaria para potenciar la inversión extranjera.
El MercurioTOKIO.- El Gobierno nipón y el gobernante Partido Liberal Demócrata (PLD) han decidido recortar el impuesto de sociedades, uno de los más altos del mundo desarrollado, por debajo del 30% en los próximos años.
La decisión la acordaron el ministro de política económica, Akira Amari, y el director del comité de política fiscal del PLD, Takeshi Noda, durante una reunión celebrada ayer, según publica este jueves el rotativo económico Nikkei.
El impuesto de sociedades nipón, que en Tokio por ejemplo se sitúa actualmente en el 35,64%, es más alto que en el resto de los principales países de Asia y Europa.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, ha reiterado que la rebaja del impuesto de sociedades es necesaria para potenciar la inversión extranjera en Japón, al tiempo que el sector privado ha presionado al jefe de Gobierno desde su llegada al poder en diciembre de 2012 para que reduzca el gravamen.
Sin embargo, aún resta acordar la fórmula para compensar el déficit recaudatorio que resultará del recorte y no incrementar así la gigantesca deuda nipona.
Por cada punto porcentual que caiga el impuesto de sociedades en Japón, los ingresos fiscales se verán recortado en unos 500.000 millones de yenes (US$ 4.921,26 millones).
Amari ha sugerido que el incremento de ingresos corporativos que está resultando de la recuperación económica merced al programa de reforma impulsado por el primer ministro debería compensar por el momento el recorte.
Sin embargo, tanto Noda como la mayoría del PLD no están convencidos de ello y han insistido en que el Gobierno debe encontrar otras vías recaudatorias.
Para ello, sugieren ampliar las bases imponibles (de manera que todas aquellas empresas no rentables que actualmente no pagan impuestos pasen a abonarlos) o retirar ciertas exenciones e incentivos fiscales que actualmente rondan los 900.000 millones de yenes (US$ 8.858,3 millones).
La semana pasada el primer ministro Abe ya aceptó recortar desde 2015 el impuesto de sociedades del país e instó a Amari y a Noda a trazar las directrices de la medida, incluyendo el volumen de los recortes y los plazos en los que se ejecutará, los cuales aún están por concretar.