SANTIAGO.- En el año 1991 fue FEPP, en 2005 apareció el Fepco, en 2010 se creó el Sipco, y ahora, nace el Mepco. Estos son los diferentes nombres que han tenido los mecanismos que han buscado estabilizar las continuas alzas en el precio de los combustibles.
Precisamente este último, Mecanismo de Estabilización de los Precios de los Combustibles pretende amortiguar las bruscas variaciones en el valor de las bencinas y éstas no superen los $5 por semana, evitándole a los automovilistas tener que soportar un incremento de $18 como ocurrió esta semana.
El proyecto, que ya fue aprobado por la Cámara de Diputados y será debatido en la Comisión de Hacienda del Senado a partir del próximo martes, busca reducir la banda de variación de precios con el que entra en funcionamiento el sistema (12,5% a 5%). Otro aspecto importante, es que este mecanismo establece que el cálculo de precio se realizará en pesos y no en dólares, para evitar influencias del tipo de cambio en el país.
Ahora bien, tres expertos consultados por Emol analizaron los aspectos positivos y negativos que puede traer el nuevo sistema.
El investigador del programa económico de Libertad y Desarrollo, Francisco Klapp, rescata de este mecanismo que las variaciones estarán controladas.
"El mecanismo de los $5 me parece súper razonable y si de hecho, lo mantuviéramos fijo, tendría mucho menos discrecionalidad que las bandas que incorpora el Mepco, porque la autoridad no fija los parámetros semana a semana o mes a mes, entonces siempre está esta tentación de presionar al Gobierno, o que el Ejecutivo en época del ciclo político quiera trata de afectar más o menos el precio de los combustibles", dice.
Por ello, el especialista considera que prefiere "un sistema que sea más automático, que esté más fijo y que sea menos discutible, como por ejemplo que tuviéramos solo la medida de los $5 o un número por semana, que pueda cambiar".
Por su parte, la economista de Econsult, Michèlle Labbé, se muestra un poco más crítica de los sistemas de estabilización de precios.
"Es lo mismo que el Sipco, con la diferencia que ahora en el fondo elimina la noticia porque ahora ya la variación no va a poder ser más de 5 pesos, que no tiene que ver con que la banda sea más angosta, sino que tiene que ver con un factor adicional que le agregaron", señala.
En esa línea, cuestiona que "sigue siendo posible manejar los precios a través de los parámetros, lo cual a mi me parece que no debería ser porque le agrega intencionalidad a la política. Sigo insistiendo que no me gustan los sistemas de estabilización, porque quitan la señal de precios, y la señal de precios cuando sube un precio te está diciendo que el bien es más escaso".
Eliminar el impuesto específico
Por su parte, el ex gerente general de Distribuidores de Combustibles (Adico), Sydney Houston, asegura que la única forma de terminar con los elevados precios de los combustibles es bajar el impuesto específico.
"El alto precio que hay en Chile no por un tema de barril ni el dólar, sino que es por el Impuesto Específico. El Mepco es la suma de todos los medios, en el fondo es la suma del Fepco, Sipco y que termina en el Mepco. Estamos tapando el sol con un dedo, porque sólo estamos interviniendo sobre el precio del impuesto específico, no sobre el precio actual", dice.
Labbé concuerda en que "sí es cierto que en Chile un 40% de lo que pagamos en gasolina son impuestos, por lo tanto, uno podría pensar en que podrías ayudar a los bolsillos de los consumidores a través de disminuir un poco el impuesto específico".
No obstante, Klapp rechaza tener que aplicar una medida de este tipo. "Bajar el impuesto específico es un mal camino, porque el impuesto tiene una razón de ser y es que la gente que consume combustible y usa sus automóviles le genera un daño al resto, genera una externalidad. El impuesto existe en casi todas los países del mundo para controlar esto", sostiene.
Por último, Houston concluye lo que se debe esperar sobre el precio de los combustibles. "Depende del real interés de la clase política y gobernante que tenga para bajar la mochila de la clase media y la clase más pobre".