LISBOA.- El Gobierno de Portugal descartó un rescate público del Banco Espirito Santo (BES), que hoy volvió a cotizar en la bolsa de Lisboa.
Durante la mañana, el Banco de Portugal (central) aseveró que la entidad dispone de reservas financieras "suficientes" para afrontar "un eventual impacto negativo" de su exposición al grupo Espirito Santo, su principal accionista con el 25% del capital.
"Sus depositantes pueden estar tranquilos", reiteró el instituto emisor luso.
Minutos después, el Primer Ministro, Pedro Passos Coelho, hizo otro llamado a la calma descartando una intervención pública, ya que el banco "tiene fondos propios sólidos y dispone de un margen cómodo para afrontar cualquier eventualidad, incluso la más adversa".
Desde hace tres semanas, el BES, el mayor banco privado del país, acusa su exposición a los problemas financieros del grupo del que forma parte, y el suspense sobre el nombre de su próximo presidente.
El jueves, estos problemas arrastraron el valor de la acción, que iba perdiendo un 17,24%, a 0,50 euros, cuando el regulador bursátil decidió suspender la cotización para permitirle a la entidad aclarar su exposición al grupo Espirito Santo.
Después de las declaraciones del banco central y el primer ministro, el regulador levantó este viernes hacia el mediodía la suspensión de la cotización del BES en la bolsa de Lisboa.
Hacia las 12:10 GMT, la acción subía 4,91%, invirtiendo la tendencia a la baja observada poco antes.
La prohibición de vender en corto la acción del BES, una estrategia especulativa que consiste en sacar beneficio de la caída de un valor, seguía vigente este viernes.
También seguía suspendida la acción de Espirito Santo Financial Group (ESFG), el primer accionista del BES, decidida de motu proprio en la víspera.
El índice PSI 20, el principal de la plaza lisboeta, avanzaba 2,3%, tras la fuerte caída de la víspera (-4,18% al cierre).