EFE
BERLÍN.- El presidente de la Cámara de Artesanos de Alemania (ZDH), Hans Peter Wollseifer, abogó por conceder a los jóvenes refugiados el permiso de residencia para que puedan ocupar las plazas de aprendices vacantes en el país, en una entrevista publicada hoy en el diario alemán "Rheinische Post".
"Entre los refugiados hay muchos con muy buena formación académica, por ejemplo, los que proceden de Irak y Siria, y muchos que tienen una gran habilidad práctica", afirmó.
La ZDH se une así a las reclamaciones de la Asociación de Cámaras de la Industria Alemana (DIHK), que también ve en los refugiados una solución para sus actuales problemas de mano de obra cualificada.
Muchas de las empresas del sector artesanal germano siguen sin conseguir ocupar todas sus plazas de aprendiz. En 2013 quedaron vacíos 80.000 puestos de formación en Alemania y una de cada cinco con vacantes no recibió ni una solicitud para ocuparla.
Las bajas tasas de natalidad unidas a la tendencia de los jóvenes a acudir a la universidad ha provocado que la industria alemana se encuentre ante graves dificultades para encontrar trabajadores.
Wollseifer cree que los refugiados podrían llenar este hueco. Sin embargo, la política debe darles algún tipo de seguridad futura. "Si formamos a estos jóvenes refugiados, debe quedar claro que podrán permanecer en el país durante todo el periodo de formación", reclamó el presidente de la ZDH.
Asimismo, deberá solucionarse el problema del idioma. "Los jóvenes refugiados deberán recibir cursos de alemán para poder asistir a escuelas de formación", indicó Wollseifer.
