SHANGHAI.- China ha completado el borrador de una nueva ley de inversión extranjera que eliminará restricciones a la inversión foránea en el país y facilitará el acceso a su mercado, anunció el Ministerio de Comercio.
Según recoge la agencia oficial Xinhua, el nuevo sistema equiparará el tratamiento a los inversores foráneos antes de ser autorizados al que reciben las firmas chinas y se basará en una "lista negativa" con los casos no permitidos.
Así, esta "lista negativa" sustituirá al método de aprobación actual, en el que las autoridades competentes locales deben aprobar explícitamente caso por caso.
Este sistema de autorización, ensayado desde septiembre de 2013 en la gestión de la Zona Piloto de Libre Comercio de China (ZPLC), ubicada en Shanghai, implica que, en principio, todo está autorizado siempre que la situación no se contemple en uno de los puntos enumerados en la lista de supuestos no autorizados.
La ley está siendo sometida a valoración pública a la espera de su aprobación definitiva, según el ministerio, una práctica habitual en el país oriental para recabar puntos de vista de los potenciales interesados que tal vez sean importantes y no hayan sido tomados en cuenta y que no suele modificar ninguno de los aspectos esenciales.
En cualquier caso, cualquier nueva inversión extranjera deberá seguir siendo informada al Gobierno chino, independientemente de si su caso está contemplado en la lista o no, y en caso de estarlo, aún cabe la posibilidad de solicitar a las autoridades un permiso excepcional a la regla para esa inversión en concreto.
Bajo la nueva ley las empresas serán consideradas chinas o extranjeras no según el grado de participación de los distintos socios, sino de "quién tiene el control" de su gestión, de manera que las firmas controladas por extranjeros serán consideradas foráneas, y las controladas por socios chinos, nacionales.