TOKIO.- Toyota, Nissan, Mitsubishi, Panasonic y otras importantes empresas niponas de los sectores del motor y de la tecnología propusieron hoy las mayores subidas salariales en más una década, una medida considerada clave para reactivar la economía del país.
Las compañías japonesas ultiman estos días las conocidas como negociaciones salariales de primavera, que se producen cada año y en las que los responsables de las empresas acuerdan con los sindicatos la evolución de los sueldos para el próximo ejercicio fiscal nipón, que comienza en abril.
Los incrementos salariales son una pieza fundamental para el funcionamiento del "Abenomics", la estrategia económica del Primer Ministro nipón, Shinzo Abe, destinada a reactivar el crecimiento de la tercera economía del mundo y dejar atrás al ciclo deflacionista que afecta a Japón en las dos últimas décadas.
El primer fabricante mundial de automóviles, Toyota Motor, acordó con los sindicatos subir el sueldo mensual base de sus empleados en 4.000 yenes (32,8 dólares), la mayor subida desde 2001, confirmó hoy un portavoz de la compañía.
Nissan Motor, el segundo mayor productor de automóviles de Japón, propuso un aumento de 5.000 yenes (41 dólares) mensuales para sus trabajadores, el mayor incremento desde 2004, señalaron hoy fuentes de la empresa.
Honda Motor, tercer fabricante nipón del sector, también decidió subir sus sueldos en 3.400 yenes mensuales (27,8 dólares), el mayor aumento desde 1994, a pesar de que prevé un empeoramiento de sus resultados para este ejercicio, tras verse afectada por el escándalo de los airbag defectuosos.
En el sector tecnológico y de maquinaria eléctrica, Hitachi, Panasonic, Toshiba, Mitsubishi y Fujifilm proponen aumentos de 3.000 yenes mensuales (23,6 dólares), los mayores en lo que va de siglo.
Muchas de estas empresas niponas han tomado esta decisión tras registrar un aumento de sus beneficios el último año, y después de que Abe y el banco central nipón hicieran sucesivas llamadas a las subidas de sueldos con vistas a apoyar la economía nacional.
"Esperamos que la tendencia para el alza salarial se expanda, y que sobrepase el nivel del año pasado", dijo hoy en rueda de prensa el ministro portavoz del Gobierno, Yoshihide Suga.
El Ejecutivo confía en que estos aumentos fomenten el consumo doméstico, uno de los pilares de la economía nipona, después de que éste se resintiera por el incremento del impuesto sobre el consumo (del 5 al 8%) que entró en vigor el pasado abril.
Por su parte, el gobernador del Banco de Japón (BoJ) Haruhiko Kuroda, señaló la importancia de que esta tendencia se contagie también a las pymes y al sector minorista, que se vieron especialmente afectados por dicha subida impositiva.
Kuroda admitió la dificultad de que Japón alcance la meta de lograr una inflación del 2% en 2015, aunque señaló que las subidas salariales "son un buen paso" en esa dirección, en una rueda de prensa celebrada el martes.