Agencias
BUENOS AIRES.- El Gobierno argentino anunció hoy que interpuso una querella contra el Citibank por no pagar bonos emitidos bajo la ley local, en virtud de un pacto firmado con los fondos especulativos que no aceptan la reestructuración de la deuda y cuentan con un fallo a favor de la Justicia de Nueva York.
Durante una comparecencia de prensa, el ministro de Economía, Axel Kicillof, detalló que el Ejecutivo argentino denunció al Citibank ante la Justicia local y pidió una medida cautelar para que se "declare nulo" el convenio entre el banco y los fondos especulativos y "todas las decisiones" que de él se desprenden.
Kicillof apuntó que el pacto "vulnera el orden público argentino porque interfiere en la regulación de nuestra deuda pública", ya que se refiere a bonos emitidos bajo legislación doméstica y no a la deuda externa, cuyo pago se encuentra bloqueado por un fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa favorable a los fondos especulativos.
El ministro recalcó que el acuerdo, firmado en Estados Unidos y convalidado por un fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa, es "ilegal" y "nulo" en Argentina.
Según el Gobierno argentino, Citibank firmó el pacto ante la "extorsión" de los fondos especulativos y pese a suponer el abandono de un negocio que, estiman, arrojaba un beneficio de US$ 17 millones para la entidad financiera.
"Lo han echado de la Argentina los buitres", aseveró Kicillof, en referencia a la filial local de Citibank, cuyas operaciones fueron suspendidas el pasado 27 de marzo por la Comisión Nacional de Valores (CNV), a consecuencia del impago de los bonos.
"Tiraron a sus clientes a la parrilla", prosiguió el titular de Economía, quien consideró que Citibank "no batalla por sus derechos ni por los derechos de sus clientes" y siempre mostró "voluntad de ponerse bajo el dominio de Griesa".
"Esperamos que la Justicia actúe prontamente", agregó el ministro.
El Gobierno apeló el lunes el fallo emitido por Griesa el pasado 12 de marzo que prohibía al Citibank realizar pagos de bonos sujetos a legislación local, en el marco de la disputa legal que mantiene el país con los fondos especulativos, que no aceptan la reestructuración de la deuda en mora desde 2001.
Poco después, el Citibank comunicó al juez neoyorquino su decisión de abandonar el negocio de custodia de bonos de deuda argentina y se hizo público un acuerdo firmado entre el banco estadounidense y los fondos demandantes.
Los fondos especulativos, que suponen poco más del 1% del total de acreedores del país, cuentan con un fallo favorable a su reclamo para cobrar en efectivo US$ 1.330 millones, más intereses.
Argentina no ha acatado ese fallo, por lo que el juez estadounidense ha bloqueado los pagos que el país suramericano debe al 93% de acreedores que sí aceptaron los canjes planteados en 2005 y 2010.