En Chile: personas non gratas

Se dice que fue gracias a los gustos musicales adelantados del hijo del alcalde de Viña del Mar Juan Tejo que una banda tan fuera de lugar como Faith Mo More pudo llegar al festival en la Quinta Vergara ese verano de 1991. Si Police ya había sido una visita extraña dentro de los elencos del certamen en plena dictadura, el primer festival de la democracia tampoco estaba preparado para que un rockero californiano diera un agarrón al trasero del animador histórico.

Era demasiado rock, demasiado desorden y demasiado hedonismo para un público que reaparecía tímidamente. Y Faith No More y las locuras de un Mike Patton pelilargo desembocaron en un doble show que alteró los órdenes dentro de un cartel con nombres como Juan Luis Guerra, Ricardo Montaner, Chayanne y Yuri. Patton dedicó una canción a una belleza latina como la Myriam Hernández de 23 años de entonces y luego la banda sacó del sombrero una terrible sesión de funk, rock y metal. Suficiente como para que un crítico de espectáculos titulara su columna del día siguiente con animadversión predecible: “Please no more”.

En 1995 el grupo regresó a Chile en circunstancias más naturales, como parte del cartel del monstruoso festival ciento por ciento rockero Monsters of rock en el entonces Teatro Monumental (Teatro Caupolicán de calle San Diego), junto a bandas protagonistas como Ozzy Osbourne y Paradise Lost.

Faith No More - We care a lot
Presentación en el Festival de la canción de Viña del Mar 1991.
Faith No More - Sweet Dreams
Presentación en el Festival de la canción de Viña del Mar 1991 y premiación con la gaviota de plata.
Faith No More - Edge Of The World
Presentación en el Festival de la canción de Viña del Mar 1991.