Por qué verlo: Porque tras partir a mediados de la década pasada como la gran promesa del indie local, el chileno ha procurado contruir una carrera en que la calidad de su obra sigue como prioridad, sin nublarse ante los halagos. Viña será la instancia para probar que lo suyo puede ir a tono con la masa.
Por qué hacer zapping: Porque aún conserva cierto aire de nicho, más cercano a jóvenes conectados que a público global de TV. Puede que muchos que quieran bailar con Carlos Vives aún no ubiquen del todo a Daniel Riveros. El cantautor se la tendrá que jugar.
Pronóstico: Será su consolidación. Gepe vivirá en 2014 lo que Francisca Valenzuela y
Manuel García experimentaron en años anteriores. El público lo pedirá de vuelta, se llevará trofeos, y tras bajarse del escenario estará oficialmente en la primera línea de la música local.