Biografía
Términos y condiciones de la información © El Mercurio S.A.P.

Sus orígenes l Exilio y clandestinidad l Liderazgo en el PC l La enfermedad l
Su lado oculto

La enfermedad

La dirigenta fue sometida a una serie de exámenes en la Clínica Tabancura, recinto al que ingresó con un diagnóstico de síndrome vertiginoso. Sin embargo, los estudios arrojaron la existencia de un tumor en el hemisferio izquierdo de su cerebro.
Tras analizar las posibilidades de someterse a un tratamiento en el país, Gladys Marín decidió viajar a Suecia el 1 de octubre. Allí fue internada en el Instituto Karolinska de Estocolmo, donde fue operada por el doctor Inti Peredo el 8 del mismo mes para extraerle el tumor de más de cinco centímetros de diámetro.

Una semana después, los resultados de la biopsia arrojaron el peor de los pronósticos: un glioblastoma multiforme, un tumor primario, canceroso y maligno, sin cura.
Luego de conocer la noticia, las máximas instancias del Partido Comunista decidieron que Gladys Marín continuaría presidiendo la colectividad.
El 19 de octubre, la dirigente viajó a La Habana, Cuba, para proseguir su tratamiento para combatir las secuelas de su enfermedad. Paralelamente en Chile se inició una campaña solidaria denominada “Fuerza Gladys”, cuyo objetivo era ayudar a solventar el costo del tratamiento.

En la isla, la presidenta del PC fue internada en el Centro de Investigaciones Médico-quirúrgicas (Cimeq), donde fue sometida a una terapia que combinaba radiaciones con un anticuerpo monoclonal cubano llamado Cimaher.
Posteriormente, la líder comunista se trasladó a una casa especialmente dispuesta para ella por el gobierno de Fidel Castro ubicada en la zona de El Laguito, en el exclusivo barrio de Siboney, donde celebró Navidad y Año Nuevo acompañada por dirigentes de su colectividad.
El 14 de febrero de 2004, Gladys Marín realizó una conmovedora aparición pública en La Habana, con motivo del lanzamiento de la edición cubana de su libro testimonio la "Vida es Hoy".
"Yo creo que cuando una se encuentra en circunstancias límites, cuando lo único que te queda es la vida o la muerte, tú dices, yo apuesto por la vida (...) Y aquí estoy, apostando por la vida", dijo en esa oportunidad.

El 12 de marzo de 2004 fue condecorada por el Presidente cubano Fidel Castro con la orden José Martí, la más alta distinción que concede el Estado cubano a personalidades extranjeras destacadas.

Dos días después regresó a Chile. Durante su estadía tuvo una pasiva participación en una marcha contra la ocupación militar de Irak, se reunió con Soledad Alvear y Michelle Bachelet, y fue homenajeada en un masivo acto político-cultural en la Estación Mapocho, oportunidad en la que recibió la condecoración "Augusto César Sandino" de manos del ex presidente nicaragüense Daniel Ortega.

Posteriormente, en mayo, Gladys Marín viajó a Chile por segunda vez, permaneciendo en el país hasta finales de junio.

El 04 de septiembre la presidenta del PC fue sometida en Cuba a una segunda intervención quirúrgica, en la que se le extrajo tejido necrosado que había quedado en su cerebro luego de la operación que se le había efectuado en Suecia.

Al mes siguiente y en el marco de las elecciones municipales, la dirigente regresó a Chile. Sin embargo, se mantuvo alejada de toda actividad política, de hecho ni siquiera votó, y tras conocer los satisfactorios resultados obtenidos por su partido y el pacto “Juntos Podemos”, retornó a Cuba.

En noviembre, los rumores sobre un empeoramiento de su estado de salud comenzaron a inundar el ambiente. Gladys Marín fue sometida a una resonancia magnética, luego de lo cual los médicos cubanos la autorizaron para regresar a Chile tal como ella quería.

De esta manera, con dificultades para hablar e impedimentos para caminar, Gladys Marín llegó a Chile el 20 de diciembre de 2004 para pasar sus últimos días junto a sus hermanas e hijos en su hogar en La Florida.

Tras ir perdiendo poco a poco sus capacidades, el sábado 5 de marzo de 2005 entra en coma y fallece a la 1 de la madrugada del domingo. Sus restos son trasladados al ex Congreso Nacional en la capital donde son multitudinariamente velados. El Presidente Ricardo Lagos decreta dos días de duelo nacional y el martes 8, día de la mujer, se realizan sus funerales y sus restos cremados.