El Portimonense derrotó 3-2 al Marítimo en la liga portuguesa. Clave para su victoria fue un grosero error de la defensa rival.
El local quiso explotar la velocidad del extremo Bruno Tabata, pero la pelota iba demasiado larga y Rene llegó primero al cruce. El defensor solo cubrió la pelota y nunca despejó, esperando que el arquero Charles Silva embolsara. Al final, ninguno se decidió, Rene dio un inexplicable toque lateral y Tabata, que nunca se rindió, anotó el primero del partido.
El duelo era clave por la parte baja de la tabla. El Marítimo es decimoquinto con 28 puntos, mientras el Portimonense es penúltimo con cuatro unidades menos.
Revisa cómo fue el tremendo error
