SANTIAGO.- Una positiva recepción tuvo la entrega del Índice de Precio al Consumidor (
IPC) correspondiente al mes de diciembre, el cual
experimentó una variación de 0,1%,
un porcentaje menor al esperado por el mercado.
Con dicha variación, la inflación de 2019 alcanzó un 3%, el centro del rango meta del Banco Central -entre 2 y 4%- y la mayor subida anual desde 2015, cuando el registro aumentó 4,4%.
Ante la cifra de 0,1% de diciembre, desde BTG Pactual explicaron que esto se debía a que "la depreciación del tipo de cambio desde el comienzo de la crisis (10% en términos multilaterales) aún no se ha traspasado por los precios tan rápido como se esperaba".
Opinión con la que coinciden en BCI Estudios, ya que aseguran que "aún no se advierte un traspaso significativo del alza del tipo de cambio a precios", por ejemplo, el "producto paquete turístico muestra una caída en precios, contrario al alza prevista. Se advierte, a su vez, un menor traspaso del alza del tipo de cambio a precios respecto a lo previsto".
Respecto al comportamiento de la inflación para los próximos meses, desde Santander pronosticaron que el IPC de enero subirá 0,4%, llevando la variación a doce meses a 3,3%.
"En los próximos registros observaremos un alza transitoria en la inflación, por sobre la meta, debido al efecto del mayor tipo de cambio y, de mantenerse las tensiones en Medio Oriente, al incremento en el precio del petróleo", explicaron desde la entidad bancaria.
Sin embargo, agregaron que "a mediano plazo, un ritmo de crecimiento más lento de la actividad local restará presiones inflacionarias. Esto, sumado al congelamiento de una serie de tarifas públicas, hará que la inflación descienda por debajo del 3% en la segunda parte del año".
Por su parte, desde BCI Estudios proyectan que el dato inflacionario del primer mes de 2019 se ubicará entre 0,2% y 0,3%.
Desde Capital Economics manifestaron que "es probable que el aumento de la inflación chilena a 3,0% a 12 meses en diciembre vaya seguido de un aumento adicional de alrededor de 4,0% durante el primer semestre de este año".
Así, agregaron que "esperamos que la caída de la moneda empuje aún más la inflación, alcanzando un máximo de alrededor de 4,0% hacia mediados de año. Esto debería evitar recortes de tasas en los próximos dos trimestres".
De todas formas, desde la consultora británica pronostican que "una recuperación del peso en el transcurso de este año dará lugar a fuertes presiones desinflacionarias, causando que la inflación vuelva a caer a alrededor del 2,0% en el cuarto trimestre".