La ministra del Trabajo,
María José Zaldívar, celebró esta mañana la aprobación del proyecto de ingreso mínimo anoche en el Senado, el cual hoy pasará a ser visto en tercer trámite por la Cámara de Diputados y podría convertirse en ley tras cinco meses de su ingreso, luego del pasado 18 de octubre.
"Esta de acá es una enorme noticia para los trabajadores de nuestro país que ganan el mínimo o muy cerca de este", sostuvo a Mega la secretaria de Estado.
La iniciativa consiste en la creación de un subsidio estatal que asciende a $59.200 para quienes perciben el salario mínimo vigente hasta el 29 de febrero del año en curso de $301.000, lo que les permitirá alcanzar un monto bruto de $360.200 y con ello un salario líquido de $300 mil.
Dicho beneficio se extiende de forma decreciente a aquellas personas que ganan hasta $384.363, y así asegurar que las cerca de 670 mil personas que se verán beneficiadas tendrán un ingreso mínimo de $300 mil líquidos.
Zaldívar destacó que en la Cámara Alta se "resolviera" la norma que "limitaba este beneficio solamente a trabajadores de empresas que se podían considerar como medianas o pequeñas. El trabajador cuando llega a su casa con su ingreso no importa si viene de una gran empresa o una pequeña empresa, sus necesidades son exactamente las mismas".
Y enfatizó: "Hay que ser bien claros: es un subsidio que se le va a pagar directamente al trabajador y en ningún caso pasa por las empresas".
Consultada respecto a si además de este ingreso mínimo el Gobierno está buscando un incremento en el salario mínimo, la ministra afirmó que "nosotros estamos trabajando también para subir el salario mínimo", recordando que "lo acabamos de subir en el mes de marzo producto de la ley establecida que tenía que indexarse al IPC, entonces se subió a $20 mil a partir del primero de marzo".
"Entonces tenemos que comenzar con la discusión que debiera acompañarnos hasta el mes de junio para una nueva alza de este salario mínimo", añadió.
Sobre la posibilidad de establecer un sueldo base diferenciado según el tamaño de la empresa, Zaldívar señaló que "voy a poner la pregunta al revés: ¿Tiene alguna diferencia el trabajador de una empresa grande al de una empresa pequeña? (...). Nosotros creemos que no, es por eso entonces que no nos paree correcto discriminar, porque además se pueden generar incentivos que son muy perversos".
"Por ejemplo, qué incentivo tiene una empresa pequeña a crecer si sabe que sus costos por ley van a aumentar de manera significativa, además de los impuestos y otros costos que tiene que cubrir. Tenemos que poner el foco en la persona, en el trabajador", concluyó.