El flujo de inversión extranjera directa (IED) que recibió Chile entre enero y febrero de este año alcanzó los US$4.779 millones, según las cifras informadas esta mañana por el Banco Central.
Se trata de un crecimiento de 346% respecto a igual período de 2019, cuando llegó a los US$1.071 millones.
Durante febrero de 2020, el flujo de IED que ingresó al país se elevó hasta los US$444 millones, lo que permitió que el monto acumulado fuera el más alto para los dos primeros meses del año de toda la serie histórica (2003).
Así, en el último quinquenio, el flujo promedio de la IED que ingresó a Chile alcanzó los US$3.119 millones.
Ante estos resultados, el director de InvestChile, Cristián Rodríguez, valoró el crecimiento de la inversión extranjera en el país en un período en que la emergencia sanitaria por el covid-19 recién comenzaba a nivel global.
"Hoy estamos frente a un escenario sumamente complejo para la inversión extranjera a nivel global, por lo que el crecimiento de la IED en los dos primeros meses del año es una buena noticia", dijo Rodríguez.
"Esta crisis no tiene precedentes y creemos que la inversión extranjera jugará un rol clave en la recuperación de nuestra economía, especialmente por su capacidad para generar empleos, que es una de las preocupaciones centrales de la agencia"
Cristián Rodríguez
Precisamente, para afrontar los meses más duros que vienen para la IED, el director de la agencia aseguró que "hemos implementado una serie de medidas para estar más cerca de los inversionistas extranjeros, con el objetivo no solo de informarlos sobre las medidas del Gobierno en esta crisis y las potenciales ayudas disponibles para ellos, sino ayudándolos a superar las dificultades que enfrentan y pensando en el mediano y largo plazo".
El componente más importante del flujo de IED durante los dos primeros meses del año fueron las participaciones en el capital con un registro de US$3.248 millones, le siguen las utilidades reinvertidas con US$947 millones y los instrumentos de deuda con US$584 millones.