Si bien en un inicio se pudo haber pensado que sería uno de los rubros más beneficiado con la llegada del covid-19 al país, hoy los datos dicen otra cosa: el escenario de las clínicas en Chile ha sido crítico, con una reducción promedio del 80% en la demanda durante abril y con algunas que ya han optado por acogerse a la ley de protección de empleo.
Un oscuro presente al que se llegó básicamente producto de la mezcla de dos factores: uno, el temor de los pacientes a acudir a centros de salud y así evitar contagios; y las restricciones impuestas por la autoridad sanitaria a realizar cirugías ambulatorias y suspender las atenciones GES en abril ¿El resultado? Una fuerte reducción de ingresos y números rojos que irrumpen en los balances de las clínicas.
La Clínica de U. de Los Andes fue la primera en hacer pública su decisión de acogerse a la ley de protección de empleo, informando que determinaron reducir en un 20% la jornada de todos los trabajadores, excepto el 20% del personas clínico, administrativo y de apoyo de as áreas que atienden pacientes con coronavirus. La red de salud UC Christus hizo lo propio, informando que un 30% de sus trabajadores verán afectadas sus labores. Mientras que la Clínica MEDS señaló que algunos de sus centros harán uso de la normativa.
En ese contexto, la gerenta general de Clínicas de Chile -gremio que agrupa a 39 clínicas a lo largo del país- Ana María Albornoz habló con Emol y aseguró nunca haber visto al sector tan afectado como ahora. "Ha sido una tormenta perfecta", dijo, y si bien afirmó que por el momento son tan solo un puñado las instituciones que se han adherido a la mencionada ley, ninguna ha esquivado las afectaciones a sus ingresos.
La ejecutiva explicó que cuando el Ejecutivo anunció a mediados de marzo las medidas restrictivas con miras a unificar el sistema y que este se enfocará en enfrentar lo que sería el peak de la enfermedad a fines de este mes -previendo 100 mil contagiados a la vez-, "nosotros participamos desde un comienzo con la autoridad y seguimos toda la normativa que dispuso para estar preparados como una red integral".
Sin embargo, comentó, "ocurre que el virus no ha llegado en la dimensión que se esperaba en este momento, por lo tanto, se pospusieron cirugías de personas que se supone que podrían esperar dado que teníamos que atender a estos pacientes tan graves que venían. En el transcurso de los días, esto le causó a los prestadores privados hartos problemas porque han dejado de hacer la actividad habitual y están haciendo actualmente un 20% de la actividad normal".
En consecuencia, recalcó Albornoz, "el golpe ha sido tremendo. La actividad de las clínicas tiene como principal costo la mano de obra, o sea, los sueldos del personal de salud se llevan el 60% de los costos de una clínica en promedio, y hay áreas que han estado prácticamente cerradas, impedidas de hacer actividad".
Anuncio del Gobierno es "un respiro"
Por eso, la líder gremial celebró el anuncio realizado ayer por el Gobierno, poniendo fin al decreto presidencial que tenía suspendidas las atenciones de AUGE-GES y autorizando la realización de cirugías ambulatorias que tengan como máximo una noche de hospitalización.
"Esto es un respiro para los pacientes y para que el engranaje vuelva a su curso", comentó, asegurando que los problemas en el sector se irán solucionando a medida que se retome la actividad. "Nosotros lo que estamos pidiendo es poder atender a los pacientes. Hubo una detención completa de la atención de salud, la gente detuvo su cuidado. Esperamos que la gente retome sus exámenes, retome sus tratamientos y cuide su salud (...), a los médicos les preocupan sus pacientes que quedaron con sus tratamientos a medias", acotó.
"La situación ha sido inédita, totalmente fuera de lo esperado. Y a la gente que opinó en algún momento que la llegada del virus iba a ser estupendo para la gente que atiende problemas de salud, eso es totalmente ajeno a lo que ocurrió".
Ana María Albornoz
Y respecto las personas que temen entrar a una clínica, Albornoz aprovechó de hacer un llamado a acudir a los centros de salud con confianza. "En las clínicas están tomando todas las medidas de precaución disponible. Pueden asistir con confianza, con seguridad a realizar sus consultas. El llamado es a no desatender sus problemas de salud".
Sobre la evolución de la enfermedad y los problemas que esto podría acarrear al sistema, Albornoz ve el futuro con optimismo. "No estamos llenos de pacientes covid (...). O sea, tenemos una buena situación respecto a esos pacientes, no hay exceso de demanda, están siendo atendidos, las camas clínicas están disponibles, los respiradores también", insistiendo en que las distintas actividades que pueden realizar las clínica "no se interponen" actualmente con los tratamientos para contagiados por coronavirus y que "la red que ha definido la autoridad sigue estando en disposición".
Por último, Albornoz aclaró que no existe desde el gremio "ninguna queja con lo que pasó", en referencia a las medidas tomadas por la autoridad, pero sí aseguró que la situación para el sector ha sido "inédita, totalmente fuera de lo esperado. Y a la gente que opinó en algún momento que la llegada del virus iba a ser estupendo para la gente que atiende problemas de salud, eso es totalmente ajeno a lo que ocurrió".