Ayer en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, comenzó el debate respecto del proyecto que propone un impuesto de 2,5% al patrimonio de los "súper ricos".
El ex ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, entró al debate respecto de este tributo, que se aplicaría por una sola vez, para enfrentar la caída de los ingresos fiscales producto de la crisis económica y ante una mayor demanda de recursos para hacer frente a la pandemia.
"Yo diría que esto se mueve más en el terreno de lo simbólico que lo económico. La recaudación que los autores (del proyecto) dicen que se obtendría es de algo más de un punto del Producto por una vez, entonces, lo que viene hacia adelante, eso realmente no hace una gran diferencia", indicó en Radio Cooperativa.
"Es justo reconocer, y hay un buen artículo hoy día en un matutino, que todos los males que se le atribuyen al impuesto al patrimonio, que yo suscribo en alguna medida, no son aplicables cuando se trata de impuestos que son por una vez, por tanto, no tiene tanto problema, pero tampoco tiene tanta virtud, más allá de lo simbólico, porque si la gente ha tenido que echar mano a su seguro de cesantía o sus fondos previsionales, mucha gente se preguntará porqué los ricos no se pueden poner", analizó.
El economista dijo que está ocurriendo algo similar a lo que pasó con el proyecto del retiro del 10% de los fondos de pensiones, "porque la carencia de poder actuar a tiempo frente a una contumacia del Gobierno, de no reconocer que aquí hay un problema de ingresos fiscales agudo, que se va ir agudizando con el tiempo, y revisar inmediatamente las exenciones y una cantidad de cosas que se han hablado, bueno, el hilo se corta por lo más delgado".
De cara "a lo que ha ocurrido en el mundo, se plantea un impuesto por una vez al patrimonio, que como decía, no es la solución del problema, tiene otra dimensión, es un elemento más bien simbólico".
Por lo mismo, Eyzaguirre planteó que "me tomo primero las palabras de la canciller Merkel, yo creo que el problema de fondo es que efectivamente los sectores más pudientes de este país pagan muy pocos impuestos, de hecho, yo mismo he planteado hace un tiempo que necesitaríamos un nuevo pacto tributario para fundar un nuevo pacto social, del orden de cinco puntos del PIB por año, al que llegaríamos gradualmente, fundado en mayores impuestos directos a quienes tienen una mejor situación económica".
"Ese es el problema de fondo, porque dado el menor crecimiento económico y la deuda social que cada día crece, esto no lo vamos a solucionar con medidas cortas", finalizó.