En línea con las estimaciones del mercado, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en mayo varío 0,3%, impulsado por el alza en los precios de transporte y equipamiento del hogar. Con esto, según informó esta mañana el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la inflación acumulada en doce meses en el país alcanzó 3,6%, el nivel más alto desde marzo de 2020.
Así, el dato interanual se acerca a 4%, el límite del rango tolerable del Banco Central (entre 2% y 4%).
De todas formas, para el ministro de Economía,
Lucas Palacios, el IPC del quinto mes del año mostró una inflación "
moderada, en línea con las expectativas del mercado y menor que en los últimos dos meses (0,4% en marzo y abril)", dijo en Twitter.
"Este indicador refleja fluctuaciones razonables en contexto de altas presiones globales de costos y alta liquidez en la economía. Destaca también la reducción en precio de alimentos (carnes, hortalizas y legumbres) y del gas licuado, que impactan directamente en bolsillo de las familias", agregó.
También comentó que en el alza del IPC de mayo incidió "la división transporte, en línea con el aumento de los precios de las gasolinas y el servicio de transporte interurbano, seguida de incrementos en el precio de artículos de equipamiento y mantención del hogar".
Por su parte, la ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga, expuso que "respecto de los alimentos el índice registró una variación de -0,2% con respecto al mes anterior. Y con respecto a las frutas y verduras se registró una disminución de 2,2%".
Además, resaltó que "la carne de pollo bajó", al igual que "la leche, el tomate, la naranja y el limón".
"Estos últimos durante este mes se encuentran en plena cosecha, y como lo hemos dicho en otras oportunidades: los alimentos varían en sus precios de acuerdo a la estacionalidad. El llamado es a que la gente cotice, que se informe", acotó.
Dicho eso, aprovechó de reiterar su rechazo a las voces que piden una política de fijación de precios a productos esenciales en medio de la crisis provocada por la pandemia de covid-19. "La fijación de precios no es una alternativa que vaya a enfrentar la problemática que se expone. Lo vemos en casos puntuales y concretos en países que han optado por esta política y que finalmente, producto de esta política de fijación de precios, disminuye el abastecimiento y eso produce aumentos de precios en mercados negros e informales.".
"Queremos avanzar en esta política del Gobierno que es en el apoyo a los ingresos de las familias para que puedan acceder a los alimentos necesarios para el bienestar de cada uno de nosotros", concluyó Undurraga.
